06 Febrero 2010
Politóloga de 50 años, Laura Chinchilla es la candidata oficialista y encabeza las encuestas de intención de voto.
SAN JOSE.- Por primera vez en la historia, una mujer está muy cerca de llegar a la presidencia de Costa Rica, al situarse como la favorita para ganar los comicios generales de mañana. Nunca antes una representante femenina de la pequeña nación, de 51.100 kilómetros cuadrados, había sido postulada a la presidencia por un partido mayoritario. Esta vez, Laura Chinchilla, politóloga, de 50 años, encabeza la fórmula del oficialista Partido Liberación Nacional (PLN, socialdemócrata), que llevó al poder hace cuatro años al actual mandatario y premio Nobel de la Paz, Oscar Arias.
La jornada de mañana estará marcada por la tradicional fiesta democrática en que se convierten los comicios en esta nación centroamericana. Unos 2,8 millones de ciudadanos están habilitados para ejercer el derecho al sufragio. El país designará para un período de cuatro años presidente, dos vicepresidentes, 57 diputados a la Asamblea Legislativa y autoridades de 51 municipalidades (gobiernos locales). Unas 40.000 personas, entre fiscales, miembros de mesas y efectivos de la fuerza pública se involucrarán en el proceso.
Chinchilla, que ha sido diputada además de haber ocupado dos ministerios y ser la vicepresidenta del actual gobierno, se presentó ante el electorado como una mujer firme y honesta. Pero sus principales oponentes la señalan como marioneta del gobierno de Arias, acusaciones que ella niega rotundamente.
En carrera
En el tribunal están registrados ocho candidatos a la presidencia. Sin embargo, según los sondeos de opinión, la intención de voto es encabezada por la oficialista Chinchilla; la escoltan Otto Guevara, del centro derechista Movimiento Libertario, y Ottón Solís, del centrista Partido Acción Ciudadana. Más atrás se ubica el socialcristiano Luis Fishman. Los otros postulantes no tienen opciones de victoria, según se desprende de los sondeos, debido a su escaso caudal electoral.
Ambiente apático
Los tres principales partidos políticos gastaron U$S20 millones en propaganda, cifra exagerada para la magnitud del país. Los comicios provocan cierta apatía en la población, por lo que se aguarda una abstención del 30% del padrón electoral. "Desde 1998 tenemos elecciones en las que el abstencionismo rebasa el 30%, lo que denota el desencanto ciudadano con la política y sobre todo con los actores políticos", dijo el politólogo Alberto Cortés.
Según encuestas, la inseguridad ciudadana y el desempleo figuran entre las principales preocupaciones de la población. Una mayoría de los encuestados se pronunció en favor de medidas de tinte represivo en cuento a seguridad: un 29% pidió más policías; 25% propuso cambiar las leyes para establecer penas más severas, y 2% se pronunció a favor de mano dura. (DPA-Télam)
La jornada de mañana estará marcada por la tradicional fiesta democrática en que se convierten los comicios en esta nación centroamericana. Unos 2,8 millones de ciudadanos están habilitados para ejercer el derecho al sufragio. El país designará para un período de cuatro años presidente, dos vicepresidentes, 57 diputados a la Asamblea Legislativa y autoridades de 51 municipalidades (gobiernos locales). Unas 40.000 personas, entre fiscales, miembros de mesas y efectivos de la fuerza pública se involucrarán en el proceso.
Chinchilla, que ha sido diputada además de haber ocupado dos ministerios y ser la vicepresidenta del actual gobierno, se presentó ante el electorado como una mujer firme y honesta. Pero sus principales oponentes la señalan como marioneta del gobierno de Arias, acusaciones que ella niega rotundamente.
En carrera
En el tribunal están registrados ocho candidatos a la presidencia. Sin embargo, según los sondeos de opinión, la intención de voto es encabezada por la oficialista Chinchilla; la escoltan Otto Guevara, del centro derechista Movimiento Libertario, y Ottón Solís, del centrista Partido Acción Ciudadana. Más atrás se ubica el socialcristiano Luis Fishman. Los otros postulantes no tienen opciones de victoria, según se desprende de los sondeos, debido a su escaso caudal electoral.
Ambiente apático
Los tres principales partidos políticos gastaron U$S20 millones en propaganda, cifra exagerada para la magnitud del país. Los comicios provocan cierta apatía en la población, por lo que se aguarda una abstención del 30% del padrón electoral. "Desde 1998 tenemos elecciones en las que el abstencionismo rebasa el 30%, lo que denota el desencanto ciudadano con la política y sobre todo con los actores políticos", dijo el politólogo Alberto Cortés.
Según encuestas, la inseguridad ciudadana y el desempleo figuran entre las principales preocupaciones de la población. Una mayoría de los encuestados se pronunció en favor de medidas de tinte represivo en cuento a seguridad: un 29% pidió más policías; 25% propuso cambiar las leyes para establecer penas más severas, y 2% se pronunció a favor de mano dura. (DPA-Télam)
Lo más popular
