27 Octubre 2009
TEGUCIGALPA.- Los asesinatos de un sobrino del gobernante de facto, Roberto Micheletti, y de un coronel del Ejército, empañaron aún más el horizonte en Honduras, que anda a la deriva desde fines de junio, cuando fue derrocado el presidente Manuel Zelaya.
Se investigan ambos hechos por separado y, en principio, se descarta la vinculación de la muerte del joven con la crisis políticas. Enzo Micheletti, de 24 años, y un amigo, fueron hallados ayer acribillados a balazos y con las manos atadas.
Por otra parte, el coronel Concepción Jiménez murió baleado el domingo en las afueras de Tegucigalpa. El comandante en jefe de las Fuerzas Armadas, Romeo Vázquez, dijo que se conoce que grupos armados extranjeros ingresaron en el país. (Especial)
Se investigan ambos hechos por separado y, en principio, se descarta la vinculación de la muerte del joven con la crisis políticas. Enzo Micheletti, de 24 años, y un amigo, fueron hallados ayer acribillados a balazos y con las manos atadas.
Por otra parte, el coronel Concepción Jiménez murió baleado el domingo en las afueras de Tegucigalpa. El comandante en jefe de las Fuerzas Armadas, Romeo Vázquez, dijo que se conoce que grupos armados extranjeros ingresaron en el país. (Especial)
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