25 Julio 2008
EXPERIENCIA. Daniel Ploper es el director técnico de la EEAOC y fitopatólogo.
La Estación Experimental Agroindustrial Obispo Colombres (EEAOC), cimentada en sus 99 años de trascendente trayectoria en investigación, desarrollo, transferencia y servicios tecnológicos en apoyo de las actividades agropecuarias y agroindustriales de Tucumán y de la región, y como institución comprometida y alerta ante las problemáticas actuales y futuras, siente el deber y la obligación de enfrentar, con alto nivel y eficiencia, las necesidades y exigencias presentes y futuras, de la sociedad y de los sectores productivos agroindustriales, sostuvo para LA GACETA Rural, Daniel Ploper, director de la EEAOC.
Por ello, es que se han incorporado nuevas actividades de investigación y servicios, teniendo en cuenta los desafíos y las oportunidades futuras, dijo el investigador. En este aspecto, corresponde destacar que, retomando los estudios de Bioenergía de décadas anteriores, se incorporó el Programa de Investigación de Bioenergía, en repuesta a la crisis energética que plantea el previsible agotamiento de los combustibles fósiles.
Ploper sostuvo -además-: “hay que remarcar la implementación del Proyecto de Estudios Ambientales en la Agroindustria, con el objetivo de colaborar con la agroindustria tucumana en el cumplimiento de las normas ambientales definidas por la legislación, el mercado y la sociedad, ofreciendo instrumentos y herramientas para la consolidación de su eficiencia y competitividad, en el marco de un desarrollo económico sustentable con consenso social y armonía ambiental”.
A ello se suma el renovado impulso a las disciplinas vinculadas a la sanidad de los cultivos (inauguración en 2007 de las instalaciones de la Sección Zoología Agrícola). Otras actividades destacables han sido: la acreditación de sus diversos laboratorios; la incorporación de nuevos servicios como el centro de saneamiento cítrico; la incorporación de las áreas de Biotecnología, de Sensores Remotos y Sistema de Información Geográfica y Agricultura de Precisión, entre muchos otros logros.
Por ello, es que se han incorporado nuevas actividades de investigación y servicios, teniendo en cuenta los desafíos y las oportunidades futuras, dijo el investigador. En este aspecto, corresponde destacar que, retomando los estudios de Bioenergía de décadas anteriores, se incorporó el Programa de Investigación de Bioenergía, en repuesta a la crisis energética que plantea el previsible agotamiento de los combustibles fósiles.
Ploper sostuvo -además-: “hay que remarcar la implementación del Proyecto de Estudios Ambientales en la Agroindustria, con el objetivo de colaborar con la agroindustria tucumana en el cumplimiento de las normas ambientales definidas por la legislación, el mercado y la sociedad, ofreciendo instrumentos y herramientas para la consolidación de su eficiencia y competitividad, en el marco de un desarrollo económico sustentable con consenso social y armonía ambiental”.
A ello se suma el renovado impulso a las disciplinas vinculadas a la sanidad de los cultivos (inauguración en 2007 de las instalaciones de la Sección Zoología Agrícola). Otras actividades destacables han sido: la acreditación de sus diversos laboratorios; la incorporación de nuevos servicios como el centro de saneamiento cítrico; la incorporación de las áreas de Biotecnología, de Sensores Remotos y Sistema de Información Geográfica y Agricultura de Precisión, entre muchos otros logros.
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