Cartas de lectores

Política-educación

“La desigualdad en materia educativa y el retroceso en indicadores clave de aprendizajes se acentúan tras la pandemia” dijeron funcionarios respecto a la educación tucumana, un tema que según dicen nuestros candidatos los desvela. Quien suscribe, papá de alumnos que concurren a establecimientos público y privado, haré mi aporte según mi seguimiento. El alumno que concurre al establecimiento privado es seguido muy de cerca por sus profesores en cuanto a rendimiento educativo; cuentan con personal que apenas descubren un cambio dificultad y/o problema en su faz social inmediatamente llaman a sus tutores para investigar el inconveniente; en cuanto un profesor renuncia y/o se ausenta inmediatamente es reemplazado por otro; es decir total atención y compromiso de los responsables del establecimiento educativo. Quien concurre a una escuela pública, todo lo contrario; la falta de profesores es una constante, ni hablar de materias que no cuentan con docentes para que las dicten y a veces termina el ciclo lectivo y jamás nombraron un profesor; es decir cero responsabilidad y empatía de quienes deben velar por la educación. También es llamativo ver cómo siguen con el mismo método de organización y dictado de clases antiguo, nunca un avance. Con esto digo que antes de construir más escuelas, lo cual es positivo, más positivo sería dotar de todo lo necesario a las ya existentes y controlar exhaustivamente el desenvolvimiento de profesores, directores y personal que componen el plantel de las escuelas públicas, tanto primaria como secundaria.

Marcelo Maza

Libro demorado

Hace cinco años, si cinco años, varios investigadores relacionados a la biología y ciencias naturales colaboramos gratuitamente para editar un libro que se denominaría “Biología, en la cresta de la ola”. El mismo fue terminado en tiempo y forma y desde entonces la Universidad Nacional de Tucumán (UNT) no logra terminar su impresión. Entiendo que hemos pasado por tiempos difíciles (económicos y sanitarios) pero en ningún lugar del mundo se tarda tanto tiempo en editar un libro. Me imagino que explicaciones habrá miles, pero a la fecha la única respuesta válida sería terminar la impresión del libro aludido. A menudo el ciudadano se pregunta que hacen los universitarios (investigadores y docentes) o en que contribuyen para la sociedad. El libro era una buena manera de entregar conocimientos actualizados sobre temas como biología y ambiente, temas que hoy dominan los medios y que preocupan al ciudadano. Como docentes e investigadores hemos cumplido. Ahora falta la respuesta de las autoridades de la UNT.

Juan A. González

San Juan 158

Lules

Suspensión de elecciones

Con la decisión de la Corte Suprema de suspender las elecciones, se han expresado todo tipo de opiniones y argumentaciones a favor y en contra de la decisión tomada. Y se seguirá opinando y seguiremos siendo espectadores de una pasarela de oportunistas, de preocupados por ganar ventaja, de apurados por garantizar el momento preciso, de especuladores que aplauden tener más días a favor y de algunos más. Desde el lugar de una ciudadana simple, me surge hacer una reflexión y comparación en la que emerge la caricatura de estas elecciones con las épicas elecciones del 83 y la recuperación de la democracia, ya que resuena como telón de fondo este sinuoso camino de 40 años. Me es inevitable comparar la emoción inaudita de aquel momento, las temblorosas manos de los votantes (peronistas, radicales, demócratas, de izquierda...) dejando el voto en las urnas con un patriotismo que nos oprimía el pecho versus la desidia y la apatía de este momento electoral en el que vemos la patria descuartizada en una mesa de conveniencias y a la Constitución acribillada por individualismos. Huelga hacer referencia a la cantidad de dinero que gastará una provincia con tal índice de pobreza como Tucumán, con la suspensión y la reprogramación de las elecciones. Imitando la gesta heroica del Gral. Manuel Belgrano pidamos la protección de nuestra Virgen de la Merced, con este nuevo enemigo que no viene de afuera, que está a nuestro lado y que nos sonríe con descaro desde los spots publicitarios.

Graciela Jatib

Procesión de Nuestra Señora de Luján

Es mi costumbre participar en la Procesión de Nuestra Señora de Luján. Y junto a cientos de personas disfruté de la presencia del Obispo. Pero quiero expresar mi descontento con el desastroso sonido que emplearon. A tal punto que era una verdadera tortura permanecer allí. Me pregunto por qué contratan algo de mala calidad si el año pasado fue tan diferente la sonorización. Me parece que es un evento de mucha envergadura que convoca a muchísima gente y también a personas de jerarquía eclesiástica. Creo en esto no hay que escatimar detalles. Espero que el año próximo el párroco de la iglesia se preocupe por deleitarnos los oídos con una calidad como se merece esta esperada procesión.

Martina Lucena

El gran simulador

Las urnas le pusieron fin a las fantasías de un Gran Simulador, que hasta hace algunas horas “era presidente”, pero los votos lo bajaron a posible funcionario (LA GACETA, 05/05). Los resultados electorales avisaron que a pesar de la gravedad de la crisis, no podemos dejar el futuro de las generaciones venideras en manos de un personaje polifacético, que en poco tiempo mostró marcadas incoherencias en temas económicos, constitucionales y hasta religiosos que ofenden la inteligencia de los argentinos. El desequilibrio emocional del “outsider”, implosionó cuando intentó condicionar una entrevista, con uno de los medios periodísticos más prestigiosos del país, como lo es LA GACETA de Tucumán sobre “…la portación de armas, y la venta de órganos de niños…”, esta última como una alternativa del mercado, para superar la escasez de fondos. Las propuestas descabelladas de Milei arrancan con un proyecto de dolarización de la economía, que contrariamente a sus sueños libertarios sería una alfombra roja al endeudamiento y el primer paso a la disolución nacional. Sus actitudes sarcásticas son un insulto al sistema democrático, y una apología a los golpes de Estado, que históricamente rechazaron el valor del voto popular; por lo tanto en caso de que un “milagro”, o la confusión del pueblo lo catapulten al Ejecutivo nacional, le sería imposible negociar cuestiones de gobierno con la devaluada casta política que siempre denostó.

José Emilio Gómez

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