13 Febrero 2023
La derrota de Boca a manos de Talleres (2-1, en el estadio “Mario Alberto Kempes) dejó una pobre imagen que preocupó a los hinchas “xeneizes” y sobre todo al técnico Hugo Ibarra, que decidió suspender el descanso que estaba programado hasta el martes. Luego de perder el invicto en Córdoba el plantel se retiró en absoluto silenzio stampa y cabizbajo, pero sí hubo margen para alguna que otra foto con los fanáticos y firma camisetas.
El rendimiento individual y colectivo dejó en claras que el equipo no está en ritmo para esta clases de partidos y, por ende, Ibarra deberá trabajar bastante en la semana para encontrar una solución. En ese sentido, el DT cambió los planes y, finalmente, el regreso a las prácticas será mañana a partir de las 17, y no el martes a las 9, como estaba estipulado en un principio.
Si bien todos los cañones apuntan al duelo del domingo ante Platense en “La Bombonera”, algunos hinchas todavía muestran su descontento por las fallas en ofensiva. Explotaron por el gol en contra de Exequiel Fernández y en especial por la falta de compromiso de Darío Benedetto, que continúa cumpliendo una sanción de cuatro fechas, impuesta en el Trofeo de Campeones con Racing.
“Pipa” estuvo en boca de todos los hinchas posderrota con “La T” y no específicamente por temas relacionados a lo futbolístico. La bronca se inició al conocerse que el delantero no viajó con la delegación a “La Docta” para el primer partido como visitante del año. En su lugar, decidió fotografiarse en un reconocido boliche, ubicado al sur de la Provincia de Buenos Aires. El “9”, que sí estuvo presente desde la tribuna en los anteriores encuentros, podrá volver a las canchas el próximo sábado 25 ante Vélez, en el “José Amalfitani”.
Con todos estos problemas y sin encontrar la respuesta futbolística tan necesaria, Ibarra ansía el regreso a las prácticas. Algunos de los temas a tratar será sin dudas la falta de gol y la insólita expulsión del colombiano Sebastián Villa, que casi se va a las manos con el arquero Javier García, que le pidió explicaciones.
Durante todo el primer tiempo Boca no pateó una sola vez al arco y, para colmo, su centrodelantero Nicolás Orsini, salió reemplazado a los 8 minutos por Miguel Merentiel.
Justo después del segundo gol de Talleres, Villa dejó a su equipo con 10 jugadores. Tras un cruce con Gastón Benavidez, le pegó una trompada y a partir de la revisión del VAR, Darío Herrera decidió expulsarlo.
Ahora el colombiano se perderá el partido del domingo contra el “calamar” y seguramente hoy, cuando se sume a los entrenamientos en Ezeiza, recibirá un tirón de orejas y reproches por esa absurda acción. Será de parte del cuerpo técnico y posiblemente también del consejo de fútbol, liderado por Juan Román Riquelme. No es la primera vez que el colombiano queda en el ojo de la tormenta por actitudes reprochables como esta.
Con todos esos antecedentes, Boca necesita calmar las aguas y prepararse de la mejor manera para volver a la victoria.
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