Los hinchas de Atlético Tucumán hacen cuentas para el regreso

Se acerca el debut de local de Atlético, pero no todo es alegría para los hinchas que esperan volver al Monumental. El fútbol argentino no es ajeno a la delicada situación económica del país y a la escalada de una inflación que siempre corre más rápido que los salarios, por lo que a muchos no les queda otra que recortar algunos gastos.

La entrada para ver al club del que uno es hincha está entre los gastos que más cuesta hacer a un lado: al fin y al cabo, no solo de pan vive el hombre. La cuestión es que la inflación ha elevado los precios de manera imparable en la última década, de suerte tal que la entrada popular que hace 10 años costaba $80, hoy se cotiza aproximadamente en $3.500 (ver cuadro aparte). Un aumento que no ha ido a la par del poder adquisitivo del tucumano promedio. Y quienes asisten con regularidad a los estadios, saben que el de la entrada es solo uno de los gastos que comprende ir a la cancha.

Por lo pronto, ya se dieron a conocer los valores de las entradas para ver a Atlético en el inicio de la Liga Profesional: Generales: $1.700 (socios) y $2.900 (no socios); Laprida: $2.100 (socios) y $3.500 (no socios). Jubilados y damas: $1.000 (socios) y $1.700 (no socios). Plateas: Sectores 1 y 2: $3.600 (socios) y $6000 (no socios). Sectores 3,4,5 y 6: $3.200 (socios) y $5.300 (no socios). Se pondrán a la venta el sábado en la Liga Tucumana, desde las 10

En cuanto a los planes para seguir al “Decano” todo el año, el club ya había comunicado los valores para tener el carnet de socio abonado y socio activo: para la tribuna Caro/Reartez $30.400 y $40.800 pesos; para tribuna Laprida es de $38.400 y $46.800 pesos, y para plateas van desde los $69.600 hasta los $78.000 pesos, incluyendo entrada y cuota social.

La cuenta rápida que se puede hacer es: teniendo en cuenta que Atlético jugará 20 partidos en condición de local durante 2023, si los hinchas deciden sacar el carnet de socio activo de las tribunas populares (Reartez/Caro) cada entrada costará $2.040; $860 menos que si el hincha decide ir abasteciéndose de las entradas partido a partido

A simple vista, parece un negocio redondo. Ni hablar si decide sacar el carnet sin cuota social; en ese caso la entrada quedará congelada en $1.520, pero claro, aunque sea conveniente para el bolsillo del hincha, no es lo que esperan los dirigentes, por una cuestión lógica. “Haciéndonos socios ayudamos. La única manera de que el club crezca es con socios, por eso la mayoría de los clubes son deficitarios. Tuvimos apoyo de muchos bancos con financiaciones sin interés, hay tarjetas que tienen todos los días seis cuotas sin interés. Si pagás hoy a seis cuotas congelás el año entero. Un 30% de inflación es nada. Pagando hoy, congelas el precio para todo el año. No sabemos a cuánto estará la entrada a fin de este torneo”, dijo Gabriel Alperovich, vicepresidente de Atlético.

El “Decano”, como algunos otros clubes, se resisten a atacar directamente al bolsillo y apuestan por una amortización que también dé sus réditos. De todas formas, la entrada no es el único gasto que deben hacer los hinchas: a eso se le suma al menos un refrigerio, el traslado (nafta o boleto de colectivo), “trapitos” y la lista sigue. Ni hablar del gasto extra que genera para los hinchas cuando el partido se juega a última hora (este domingo enfrentará a Talleres a las 21.30). Cuando el partido termina pasada la medianoche y el transporte público ya no funciona, a muchos no les queda otra que volver a sus hogares en taxi.

A esta altura, asociarse parece la mejor opción. Muchos apuestan por utilizar la tarjeta y olvidarse por el resto de la temporada. El problema surge cuando es un grupo familiar y la suma excede el margen del plástico. En ese caso no quedará otra que resignarse y esperar un guiño de la AFA y los valores previstos se mantengan hasta fin de año. Aunque parece difícil...