
ESTIRPE FAMILIAR. El Indio Lucio Rojas creció escuchando folclore con sus padres y hermanos dentro de Salta. prensa indio rojas

Antes de ser cantor fue bailarín “sachero” del monte, en el pueblito de Santa Victoria Este -en el Chaco Salteño- donde se crió junto a sus hermanos Jorge y Alfredo.
“Cuando era chico bailaba en la sombra, no a la luz de los fogones, para que no me vieran mis viejos. No nos permitían bailar a los chicos. Después nuestros primos más grandes ya nos invitaban a bailar en el patio, con la familia”, contó el Indio Lucio Rojas, que esta noche actuará en el festival Atahualpa -que se iniciará a las 20 en el Club Central Córdoba- acompañado por siete músicos y tres bailarines. Promete un espectáculo con gran despliegue también en lo visual.
“Volver a Tucumán, a este festival que es el emblema de las fiestas populares de la Argentina, tiene un significado artístico inmenso para nosotros los cantores -dijo-. Vamos a presentar canciones nuevas y también del último disco, ‘Soy del monte’. Hay canciones que yo hice en la pandemia, que están en las plataformas digitales y que hace muy poquito las empezamos a cantar en el escenario”.
- ¿Después de la pandemia el público está más efusivo?
- Hay algo muy significativo que está pasando en todas las fiestas populares del país: la concurrencia es maravillosa. Se nota esa comunicación que hay con la música de uno y las ganas de compartir.
- ¿Cuáles son tus temas más populares?
- Yo, principalmente, soy cantor folclórico. Hay varias chacareras que también han crecido en las redes sociales y en las plataformas digitales. Por ejemplo, “La Chacarereada”, “Yo soy el Indio” y otras que nos identifican, que son de la familia: “Marca Borrada”, “De esas que hacen llorar” y “No me abraces porque lloro”. Pero también hay otras canciones, como una versión que hice de “Jurabas tú”, una cumbia de Los del Fuego, que tiene muchísimos años, le hemos dado una impronta muy folclórica y se ha posicionado en un lugar de privilegio. La gente la canta, la baila y la disfruta mucho.
- ¿Tu forma de sentir el folclore se vincula con tu lugar de origen?
- Ahí está mi identidad, sin ninguna duda. Hemos crecido escuchando puro folclore. Hasta los ocho o nueve años, que hemos escuchado la radio por primera vez, conocíamos solo la música nativa nuestra con bombo y violín. No había ni guitarra. La guitarra aparece con los cantores nuevos, que para nosotros son referentes, como el Chaqueño Palavecino, Pastor Juárez, el Negro Palma, que son hijos de esta tierra. Antes no había cantores. Los primeros referentes cantores han sido Las Voces de Orán. La música ancestral del violín y el bombo tenía que ver con el baile. Después, a través de la radio nos llegaba principalmente la música santiagueña: Los Carabajal, Los Manseros Santiagueños... Yo de ahí he salido a los 17 años.
- Otro factor importante en tu carrera es la familia.
- El abanderado de la familia es Jorge, que ha sido el protagonista de todo este movimiento que se generó. Si yo pude entrar a ser la primera voz de Los Carabajal, fue por Jorge. Después él se va de Los Nocheros y ahí arranca una etapa maravillosa, donde compartir el escenario con mis hermanos es lo más lindo que nos ha pasado. Y después nace este proyecto de El Indio Lucio Rojas, que también fue idea de él. Lo disfruto y lo llevo con profesionalismo, defendiendo nuestra raíz folclórica.







