Orquestas donde el talento crece y se reparte

Entre otros haceres, es referente del charango, docente, director; y también militante de la música como factor transformador. Desde 2005 Rolando Goldman interviene en el Programa Social de Orquestas Infantiles y Juveniles del Ministerio de Cultura de la Nación, que toma características propias, bien argentinas y latinaomericanas.

Goldman está en la provincia al frente del 2° Encuentro de las Becas Martha Argerich (ver “35 músicos”). En la presente gestión de Cultura al músico le encomendaron “volver a reunir a todo aquello que se había creado y retomar las redes entre las orquestas, con la premisa de crear nuevas; en 2020 había 60 formaciones entre las dos ramas (seguimos manteniendo la rama clásica o académica)”. “Actualmente hay unas 90 y si todo sale bien a fin de año estimamos que habrá 120 o en todo el país”, anuncia.

Sistema de ayuda

Siguiendo la premisa inicial del programa surgió la posibilidad de crear un sistema de becas para jóvenes que reunieran años de experiencia en las orquestas y que hubieran encontrado la vocación en la música.

Goldman tomó la experiencia de vida de la famosa pianista argentina, quien a los 12 años recibió apoyo del Estado para estudiar becada en Austria junto a sus padres. “Esa ayuda fue determinante en su formación y en su carrera -señala-. Le propuse a Argerich que queríamos tomar su nombre para estas becas. Ella aceptó gustosa, y planteó que quería ser madrina de nuestro programa. Empezamos a delinear los contenidos y se convocó a los jóvenes mayores de 18 años”.

Las becas son bianuales y los becarios reciben capacitaciones “en técnica instrumental o vocal, nociones de pedagogía, de didáctica, de manejo de arreglos en programas de internet, de escritura musical, arreglos para orquestas, y entre todos ellos conforman además la Orquesta de los Becarios. Hay chicos de Tucumán, Mendoza, Santa Cruz y Río Negro”.

Primer encuentro

“La formación fue virtual, por eso fue conmovedor para ellos encontrarse por primera vez para un concierto presencial a fines de 2021 en el CCK -recuerda-. Este segundo encuentro es en Tucumán porque la orquesta Rolando Chivo Valladares viene en crecimiento, con un trabajo muy serio de toda la gente de Mate Cocido, en particular de los profesores y del director Rony López. Además hay tres becarios de la orquesta”. Se refiere a César Agustín Núñez, Dardo Emanuel y Dante Maximiliano Godoy.

Dos becarios

“Toco el charango y en la beca me estoy formando en ese instrumento. Formo parte de la Orquesta Popular Rolando Chivo Valladares”, informa Godoy.

“La beca para mí ha significado un montón -expresa-. Con la pandemia se había cortado el estudio en la Facultad. Que hayamos sido seleccionados para la beca en 2020 fue muy importante porque sentimos que no hemos perdido el año. Son becas de formación docente. Significan mucho porque han marcado un camino. Nosotros, como jóvenes, no sabíamos si seguir estudiando o no hace dos años. Han posibilitado que reafirmemos nuestro camino en la docencia y en la música. Estamos en plena formación; muy contentos de haber participado en el I Encuentro en el CCK, que ha sido maravilloso. Y en este nuevo, al que vienen los becarios de todo el país; es muy importante como política pública que se dispongan recursos para que los jóvenes se formen en lo artístico y que al mismo tiempo se valorice la música y el arte como profesiones. Las becas significan mucho en nuestras vidas, y a partir de ahora se vienen muchas más oportunidades musicales y también para enseñar: hoy en día estamos enseñando en la propia orquesta”.

María Luz Andrada es de Garín (Escobar, provincia de Buenos Aires). “Pertenezco a la Orquesta Tunquelén; toco charango y roncoco -se presenta-. Las becas permitieron tener una experiencia muy gratificante; generaron un gran compromiso en mí por toda la cultura argentina y también por la música. Fue una oportunidad para desplegar toda la capacidad para tocar. Además, el vínculo que se generó con compañeros y compañeras de la beca es buenísimo; pudimos compartir muchos conocimientos y eso es muy valioso para nuestra formación y también para nuestra vida”.