21 Febrero 2022 Seguir en 
En estos días, tuve la oportunidad de ver una excelente película sobre la vida de Ana Frank en una de las plataformas. A propósito de ello, consta en la historia que de los 8 escondidos en “la casa de atrás” el único que sobrevivió a la guerra fue Otto Frank (su padre) cuando el 27/01/1945 fue liberado del campo de concentración de Auschwitz por los rusos. En marzo emprendió su viaje de regreso a Ámsterdam, desde Odessa, a orillas del Mar Negro, se embarcó a Marsella, Francia y de ahí en un camión rumbo a Holanda. Otto Frank, al llegar, se dirigió a la casa de los Gies, sus amigos, con esperanza de saber de sus hijas, Margot y Ana y que sabía habían sido confinadas al campo de concentración de Bergen-Belsen. Dos meses después se anotició de que habían fallecido y su amigo Miep Gies, que había recuperado el diario de Ana Frank, se lo entregó y él al leerlo quedó asombrado pues no imaginaba que Ana había descripto tan bien lo sucedido en “la casa de atrás”. Sus amigos insistieron en que lo publicara. El 3 de abril de 1946 el periódico Het Parool hizo un artículo acerca del diario y la primera edición apareció en el verano de 1947 contando con una tirada de 1500 ejemplares: Otto hizo realidad el sueño de Ana de convertirse en escritora y lo tituló: “La casa de atrás” o “Las habitaciones de atrás”. Después se publicó la traducción del diario al francés y al alemán y en 1951 al inglés adquiriendo fama mundial. Ana Frank se convirtió en el símbolo de 6 millones de judíos asesinados por los nazis durante la Segunda Guerra Mundial. En los siguientes años, Otto, que se volvió a casar, dedicó el resto de su vida a la difusión de las ideas e ideales de su hija. En 1979 escribió (un año antes de su fallecimiento): “En ningún momento Ana menciona el odio en su diario, escribe que cree en la bondad del hombre pese a todo, y que quiere trabajar para el mundo y para la humanidad para cuando acabe la guerra”. La casa de Prinsengracht 263 en Ámsterdam sirvió de refugio a la familia de Ana Frank. Años después la Fundación logró salvar la casa de su demolición y hoy es un museo y un testimonio palpable. En Buenos Aires existe en el barrio de Belgrano (Superí 2.647) una réplica de “la casa de atrás”, única en América del Sur, que puede visitarse si uno no puede viajar a Holanda e imaginar como fue el cautiverio de Ana y su familia: abrió sus puertas el 12 de junio del 2009 en conmemoración del 80 aniversario del nacimiento de Ana Frank.
Juan L. Marcotullio
Ituzaingó 1.252 Yerba Buena
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