25 Noviembre 2021
Al menos 31 migrantes que cruzaban el Canal de la Mancha en una embarcación precaria, con destino al Reino Unido, murieron ayer en un naufragio cerca de la costa de Calais, al norte de Francia. Las labores de búsqueda, que continuaban anoche, empezaron después que un pescador alertara sobre el descubrimiento de unos 15 cuerpos flotando frente a las costas de Calais.
Las autoridades no descartan que aumente el número de muertos. Tres helicópteros y tres barcos participaban en las labores de búsqueda, y la fiscalía de Dunkerque, al norte de Francia, anunció la apertura de una investigación.
Esta tragedia sucede cuando crece la tensión migratoria en Calais y alrededores, después de los picos de los años 2015 y 2016. En los 10 primeros meses de este año intentaron atravesar irregularmente el Canal de la Mancha por vía marítima para llegar al Reino Unido 24.655 personas. En todo 2020 habían sido 9.551.
El de ayer es el accidente más mortífero desde que, en 2018, se produjera un repunte de los intentos por cruzar el Canal tras el cierre para los migrantes del puerto de Calais y el Eurotúnel, vías tradicionalmente utilizados para llegar a Inglaterra.
Antes de este naufragio, en 2021 hubo tres muertos y cuatro desaparecidos. En 2020, seis personas perdieron la vida y otras tres desaparecieron. En 2019, se registraron cuatro muertos.
El primer ministro británico, Boris Johnson, convocó una reunión interministerial tras conocerse la noticia. “Francia no dejará que la Mancha se convierta en un cementerio”, dijo el presidente francés, Emmanuel Macron, quien pidió el “refuerzo inmediato de los medios de la agencia Frontex en las fronteras exteriores de la Unión Europea”, y una “reunión de urgencia de los ministros europeos concernido por la cuestión migratoria”. (Reuters-Especial)
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