22 Octubre 2021
Un estudiante de la escuela Cacique Canamico de Las Palmitas, en el interior de Leales, conociendo la Casa Histórica; o una alumna de la escuela Nueva Pompeya, en el Mercofrut, aprendiendo en el observatorio de Ampimpa. Miles de imágenes que resumen la idea de la experiencia inolvidable. El valor pedagógico del viaje educativo transforma vivencias personales en una política educativa sostenida por el Ministerio de Educación de la Provincia. Niños, niñas y jóvenes, que luego de casi dos años muy difíciles que han marcado la vida de todos, son hoy protagonistas de una presencialidad plena (y valorada) en las escuelas y comienzan a realizar un turismo educativo que es motivo de profunda alegría y completa un círculo sumamente virtuoso que parte desde una lucha contra la deserción escolar (el viaje motiva a estar en la escuela), mejoras los rendimientos escolares (el viaje profundiza los aprendizajes significativos) y se amplían los universos culturales (la experiencia puede ser una forma de estudio que supera el saber teórico). Todo esto consolida las trayectorias educativas y a su vez es un gran potenciador de las futuras vocaciones que pueden elegir los estudiantes en su plena formación educativa. No se puede elegir lo que no se conoce. La familia educativa celebra la articulación entre el Ministerio de Educación y el Ente de Turismo para hacer realidad una experiencia educativa que permitirá conocer nuestra provincia, pero que en sí lo que subyace es una ampliación de los universos culturales y el fortalecimiento de las trayectorias educativas de miles de estudiantes.
Pablo Guillermo Sosa
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