18 Octubre 2021
No, solamente circo; de pan ni se habló más. Más aún, se anunció que los planes sociales se irán reduciendo para volver al trabajo, generador de dignidad y de menor endeudamiento del Estado. Qué raro, ¿No? Primero cada día más el Estado en esta desesperada lucha por recuperar los votos democráticamente perdidos, desembolsa miles de millones de pesos en regalos, propaganda, dádivas, y lo más impresionante, en viajes de egresados para 220.000 alumnos a los que se privó de estudiar y socializar, ya sea de colegios públicos o privados. Aunque, a decir verdad, les diría que no se lo crean, pues después de las elecciones de noviembre pueden argumentar cualquier motivo para que eso no se cumpla. Segundo: los tucumanos vivimos en esta semana un día vergonzoso, increíble, de una impunidad rayana en la obscenidad. ¿Qué fue ese abrazo tan eufórico, al menos en apariencia, entre nuestro gobernador y vice que durante meses nos tuvieron en jaque, sin gobernar, sin trabajo, sin educación, sin instituciones funcionando, peleándose como dos niños dueños de un “ juguete“, el Estado provincial, que es patrimonio de todos? Fascinados por que le “ regalaban “ al Presidente un estadio con 40.000 personas, que ya sabemos cómo las consiguen, en medio de restricciones inhumanas para los ilusos y mansos ciudadanos que tienen terror de salir a quejarse, o no acompañarlos, porque van a perder la mísera dádiva que reciben. Me impresionó ese abrazo de oso que se dieron. Siempre pensé que el abrazo es el gesto más significativo de amor, de solidaridad, de consuelo. ¿De qué disimulado o convenido sentimiento habrá estado compuesto ese si tardío y repentino abrazo de Manzur y Jaldo? Cada vez les creo menos. Cada vez creo más que son incorregibles. De verdad, lo lamento profundamente, porque hacen mucho daño.
Florencia Aráoz de Isas
Santa Fe 90
San Miguel de Tucumán
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