Las raíces afro vuelven a ser música y danza, como hace 15 años

Las raíces afro vuelven a ser música y danza, como hace 15 años

“La re vuelta de los negros” es la nueva propuesta del grupo Cosa e Negros, que lideran Carlos Podazza y Viviana Taberna.

FIESTA MUSICAL. Taberna y Podazza (al centro) al frente de una propuesta llena de ritmo, color y sabor afro. FIESTA MUSICAL. Taberna y Podazza (al centro) al frente de una propuesta llena de ritmo, color y sabor afro.

Son ritmos que describen la costura musical del continente latinoamericano. Salsa, cumbia, merengue, saya, landó, milonga y bomba puertorriqueña, entre otros géneros, pondrán en escena la vertiente negra de esta música en el marco del 61° Septiembre Musical del Ente Cultural.

Cosa e Negros presenta “La re vuelta de los negros”, hoy a las 20 en la sala Orestes Caviglia (San Martín 251).

A Carlos Podazza y Viviana Taberna, que alumbraron el grupo hace 15 años, hoy acompañan quienes se llaman a sí mismos “los negros de siempre”, es decir Manolo Alonso en percusión latina, Javier Podazza en batería y Matthias Agüero Hinz en bajo. También se suman a la fiesta Quique Yance en teclados, Carla Guzmán en flauta traversa y aerófonos andinos y Carolina Saad Tejada en coros.

En danza se suman esta vez Verónica Andrade, Pedro Costas, Daniel Pascual y Noelia Gigena.

Los orígenes

“Este proyecto nace a partir de las intenciones y las ganas de Viviana de hacer música afro y sabía que yo había hecho una investigación”, recuerda Podazza. “Lo primero que había recopilado entonces eran canciones con raíces afro, y así juntamos la primera propuesta en 2005 en el Virla, que fue un éxito en el Julio Cultural. Hicimos dos funciones llenas y, al jueves siguiente, recuerdo que nos pidieron que ocupáramos la fecha por un número que se había caído. Volvimos a hacer dos funciones más”, agrega.

Aquel éxito de público impulsó a Podazza en la necesidad de profundizar la estética y a pensar en el crecimiento del espectáculo.

“Empecé a investigar más seriamente, con informaciones de libros que habían sido prohibidos, en los que se manifestaban algunas vivencias de la presencia afro en el continente y en particular en la Argentina -afirma-. Fuimos al Archivo Histórico y recabamos información de la trata de negros, de la participación de los jesuitas con sus esclavos; qué pasó con los esclavos cuando la congregación es disuelta y se los expulsa, y qué pasaba con los censos. Hubo una generación, la del 80, que intentaba ocultarlos, y los mismos negros que se fueron eliminando de los censos porque les daba vergüenza reconocer sus raíces. La presencia negra en nuestra cultura es importantísima; desde comidas hasta palabras que tienen raíz en vocablos africanos”.

Junto al espectáculo musical se sumaron las danzas y llegaron incluso a hacer participar títeres negros que interactuaban con los artistas en algunas canciones.

“Formar parte de esto fue maravilloso. Tuvimos un éxito increíble y así, con éxito, cerramos un capítulo en 2014, cundo decidimos no disolver el grupo, pero cerrar los proyectos”, señala.

Sonoridad intacta

Podazza señala que ahora, en esta revuelta, “fue interesantísimo descubrir que nuestra sonoridad esta intacta; y a pesar de muchos grupos que aparecieron luego tomando parte de estas raíces para interpretar canciones un poco -tal vez- más populares, que suenan bien, por ahí nos planteábamos si no estaba ya dado este puntapié para estas manifestaciones costumbristas de lo afro. Y nos damos cuenta, con gran satisfacción, de que nuestro sonido tiene características propias”.

El músico destaca que como parte de la movida, en su momento vino como invitada la presidenta de la Fundación África Vive, de Buenos Aires, entre otras personalidades y se dieron el lujo de hacer un show en el Virla que comenzó a las 15 y terminó a la medianoche con debates, proyecciones, música y danzas.

“Participar en Cosa e Negros me da en mi proyecto de vida y de música la sensación de es muy lindo gastar no sólo las manos y el trabajo, sino también el alma. Y así es como me siento, con el alma y las manos gastadas”, confiesa.

Taberna coincide con Podazza. “Desde el comienzo, la conformación del espectáculo que hicimos a lo largo de tanto tiempo se fundó en las ganas de cantar y de hacer música de raíz afro. Fue una idea inicial mía, y convoqué a Carlos para que me acompañara. En aquel momento, empezamos a pensar en un repertorio variado que pudiera definir desde lo musical, lo conceptual, lo histórico y lo literario, desde las danzas y las costumbres, todo el aporte de la cultura negra a nuestra música latinoamericana”, señala.

“La iniciativa de retomar el espectáculo se dio de manera casi simultánea entre Carlos y yo mientras disfrutábamos de una tarde en Tafí del Valle, a fines de 2019, y la propuesta era para hacerla a comienzos de 2020, pero por los motivos de público conocimiento todo se fue retrasando”, comenta acerca de la propuesta que hoy llega al Septiembre Musical.

Ante la avidez por conseguir entradas por parte del público, la cantora sugiere: “como la entrada es libre y gratuita sugerimos que vayan con bastante antelación porque si bien la sala Caviglia es muy amplia, creemos que nos va a quedar pequeña porque es una fiesta de mucho ritmo, color y sabor. Hay una banda conformada por artistas de destacada trayectoria y sobre todo estamos desde el escenario queremos compartir el disfrute”.

La capacidad del espacio está acotada al 50%, confirmó el Ente.

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