Cambios en el Gabinete de la Nación: La noche en la que la política tucumana no durmió

El lunes, a las 16, Manzur asumirá su nueva función. Hasta entonces seguirá siendo el gobernador en ejercicio de Tucumán.

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La política está desvelada. Se pasó la noche y la madrugada de esa manera. No durmió. Juan Manzur fue confirmado como jefe de Gabinete de la Nación a las 22.30 de ayer e inmediatamente se aceleraron las palpitaciones de la dirigencia tucumana. De un lado del oficialismo, aquel sector que responde a la Casa de Gobierno, hubo caras de alegría pero también de desconcierto. 

¿Qué harán algunos ministros sin el paraguas protector del gobernador en medio de una puja con el  vicegobernador Osvaldo Jaldo? Manzur intentó llevarles tranquilidad. Apenas terminó de cerrar algunos acuerdos y detalles con el presidente Alberto Fernández y con varios de sus ahora colegas de gabinete, el mandatario tucumano comenzó a devolver llamadas a sus colaboradores. La mayor parte de ellas fue después de las 1,30 de hoy.

El tucumano se tomará este fin de semana para analizar quiénes lo acompañarán en su incursión por Buenos Aires. No serán muchos. "Llevo poca ropa; tengo pensado volver", le comunicó el gobernador a sus ministros. Hoy está en La Rioja y mañana nuevamente en esta ciudad. El lunes a las 16 asumirá su nueva función. Hasta entonces seguirá siendo el gobernador en ejercicio de Tucumán, más allá de que la Legislatura haya sido convocada a sesión extraordinaria para tratar la licencia del mandatario. Esta mañana, con el diario en la mano, Manzur sintió un déjá vu. 

Vuelve a un gabinete en el que estarán casi los mismos nombres de hace 12 años, cuando fue ministro de Salud de Cristina Kirchner. Aníbal Fernández (ahora en Seguridad), Jorge Taiana (Defensa) y Julián Domínguez (Agricultura) son algunos funcionarios que vuelven a la Casa Rosada junto con Manzur. Pero el tucumano se apoyará también en otro aliado incondicional: Eduardo "Wado" de Pedro, el ministro del Interior kirchnerista que inauguró la temporada de renuncias en la crisis del Frente de Todos, pero que fue confirmado en el cargo y que hoy estará en tierras riojanas junto con los gobernadores. 

Otro que está muy cerca del mandatario tucumano es Martín Guzmán, el ministro de Economía cuestionado por Cristina Fernández de Kirchner pero que ha logrado sobrevivir a los embates políticos porque su misión está concentrada en llegar a un acuerdo con el FMI.

Jaldo tampoco pudo dormir. La embestida nacional es tal que el vicegobernador tuvo que cargar varias veces su celular porque se estaba quedando sin batería política. El presidente de la Cámara se aferró a sus más estrechos colaboradores en su oficina del edificio de Muñecas al 900. La excusa era clara: analizar la licencia de su compañero de fórmula. La ocasión ha sido propicia para analizar lo que se viene. Y surgieron interrogantes de fondo. 

Cambios en el Gabinete de la Nación: La noche en la que la política tucumana no durmió

¿Hasta cuándo podrá Jaldo resistir las embestidas de las principales figuras nacionales? ¿Cómo será el ejercicio de poder si decide resistir y ejercer, interinamente la conducción del Poder Ejecutivo? ¿Quiénes serán sus colaboradores? ¿Cómo accionará o actuará frente a aquellos mismos funcionarios con los que se cruzó, verbalmente, en la cruenta campaña de las PASO?

Jaldo sabe que baila con las más fea. Como hombre de campo, ejemplifica con los rebencazos que ha recibido por su resistencia. Insiste en que no hará locuras y que no hay encono alguno cuando en el medio hay una gestión que mantener y una campaña proselitista que realizar. Aún así, sus gestos del pasado reciente despierta la desconfianza de los hombres de Manzur. Claudio Maley está tan incómodo como Juan Pablo Lichtmajer o Miguel Acevedo, tres ministros del gabinete que hay recibido duros cuestionamientos de la bancada que responde al vicegobernador.

Las especulaciones siguen siendo numerosas. Una que dice que Sergio Mansilla, presidente del bloque de legisladores de Lealtad Peronista, será propuesto para conducir el cuerpo si es que Jaldo decide dar un paso al costado. 

Otra que señala que Gerónimo Vargas Aignasse volvería a la mesa chica de la Cámara si Jaldo decide continuar y hacer caso omiso a las recomendaciones nacionales. En lo que sí hay seguridad es en que hoy no habrá asado jaldista en Central Córdoba. 

"Atento a los últimos acontecimientos nacionales con respecto al nuevo Gabinete que pondrá en funcionamiento nuestro Presidente y de los cuáles Tucumán será parte, nuestro vicegobernador tendrá múltiples reuniones este sábado", comunicaron desde la organización del encuentro de Peronismo Verdadero.

La política sigue desvelada. Hay intendentes que están consultando permanentemente a la Casa de Gobierno acerca de lo que sucederá en caso de que Jaldo se convierta, interinamente, en gobernador de la provincia en reemplazo transitorio de Manzur. Ya no es sólo campaña; muchos creen que está en juego su tranquilidad de gestión, tomando en cuenta las intromisiones jaldistas en cada una de las jurisdicciones.

Nada está dicho aún. Tras su viaje a La Rioja, Manzur retornará a Tucumán esta misma tarde. Para las 20 citó a algunos de los principales referentes de su espacio. Tal vez hasta entonces haya cierta claridad acerca de lo que hará antes de asumir como jefe de Gabinete de ministros de la Nación.

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