Por Nicolás Sánchez Picón
10 Septiembre 2021
EL AUTO HABLA. El estado del interior del vehículo puede identificarnos como buenos o malos conductores.
La experiencia de manejar en Tucumán puede ser muy negativa: la falta de respeto por las normas de tránsito, las discusiones y los accidentes, que ya son parte del paisaje urbano, dificultan y hacen imposible muchas veces una buena práctica, al punto de preguntarnos si es el otro el que está mal, y si realmente somos buenos conductores.
No son sólo unos pocos; gran parte de los automovilistas rompe diariamente las reglas... No hace falta más prueba que ir hacia las calles y mirar el ambiente: bocinazos, doble fila, vehículos rebasándose o doblando de manera ilegal... Básicamente, el pan de cada día. Pero, entonces, ¿cómo puedo reconocerme un buen conductor?
Julieta Santillán, instructora de manejo, dueña de la academia de manejo Test Drive 2.0 (si abonás tus clases con Club LA GACETA, tenés un 20% de descuento) enumera algunos errores comunes que pueden denotarte como un mal conductor. “Lo más típico es tener las manos en el cambio, algo totalmente erróneo. Tenerlas ahí denota que sos mal conductor: la caja de cambios tiene una vibración natural, y al ponerle el peso de la mano encima, no dejás que vibre correctamente y la estás limitando”.
“Anticiparse un cambio, no prender las luces bajas, que son obligación, frenar sin balizas y girar sin guiño, la falta de cinturón, la mala señalización, el giro a la izquierda que está prohibido”, son otros errores frecuentes, enumera la instructora.
Demasiado embrague
“Yo los llamo embrayadores compulsivos. Una de las cosas que un buen conductor no hace es mantener el pie haciéndole sombra al embrague. Sólo hay que usarlo para poner y sacar los cambios. Si vos mantenés mucho tiempo el pie ahí, el embrague se desgasta”, advierte Santillán.
Las velocidades
La instructora comenta que acelerar o frenar constantemente es un error que se repite mucho y es algo que un buen conductor no debería hacer. “Las aceleradas y frenadas bruscas te dicen qué clase de conductor sos. Si frenás y acelerás, el consumo de nafta se incrementa, es mayor... Estás usando mal el vehículo, gastándolo de manera errónea. Eso y el pie en el embrague dañan el vehículo”, explica.
Mirando se aprende
Claudia Castro, otra instructora de manejo, que además fue una de las primeras mujeres taxistas de la provincia y también fue colectivera y camionera, nos cuenta que aprendió a identificar a quienes manejan bien y mal y nos comparte algunos consejos. “Vos mismo te vas a dar cuenta, como conductor, si hacés las cosas bien o no cuando aplicás las leyes de tránsito. Para esto, observá al otro, lo que hace: cuando decís ‘uh, mirá lo que hace este’, preguntate si vos no lo hacés”, recomienda.
La higiene
Para Claudia, el sólo ver el auto de un conductor dice todo de él. “Vos ves que hay autos que están abollados por entero, que están tocados por detrás, por adelante... Bueno, eso muestra como conducís. La higiene de un auto es la higiene de la persona; yo he subido a autos impecables, y a otros que parece que los sacaron de la concesionaria y nunca los han limpiado. Y eso habla mucho de quién es el dueño, cómo lo cuida y cómo conduce”, resalta.
¿Tengo todo en regla?
Una cuestión muy importante pero que muchas veces se deja de lado es la relacionada a la reglamentación. Añade Castro: “si tampoco me preocupo por tener todo lo que tengo que tener en regla, eso también habla de vos como conductor, porque estás infringiendo la ley, salís sin papeles reglamentarios, sin el carnet, o la Verificación Técnica Vehicular (VTV), o la cédula azul en caso de que el auto no sea tuyo...”
¿Y los errores?
Y si todavía no sabés si sos un buen o mal conductor, te contamos cuáles son las faltas más comunes que cometen los tucumanos al volante. Si hacés estas cosas normalmente, estamos en problemas...
“Las faltas que comete el mayor porcentaje son las relacionadas al estacionamiento: estacionar en zona prohibida sobre todo. Por ejemplo en el bar que está en el parque Avellaneda sobre Mate de Luna, aunque está prohibido, la gente estaciona y todos los días se hacen multas”, explica Enrique Romero, subsecretario de Tránsito de la Municipalidad de San Miguel de Tucumán. “Luego viene el problema de la doble fila, que es la principal infracción. La tercera falta tiene que ver con el teléfono y con circular hablando por celular y, por último, la luz roja: hicimos un estudio y vimos que el 100% de los motociclistas violó la luz roja alguna vez, y el 27% de los autos lo hace”, añade.
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