Cambio climático: lo que será necesario hacer en Tucumán

Cambio climático: lo que será necesario hacer en Tucumán

Como con la pandemia, Europa nos adelanta lo que se viene con el calentamiento, dicen Alejandro Brown y María José Foguet, de ProYungas.

INUNDACIONES DE 2018. Foto tomada en Ranchillos, después de una tormenta de verano. LA GACETA/DIEGO ARAOZ INUNDACIONES DE 2018. Foto tomada en Ranchillos, después de una tormenta de verano. LA GACETA/DIEGO ARAOZ
24 Julio 2021

"Del mismo modo que hemos seguido con atención la evolución en Europa de las distintas olas de la pandemia de coronavirus, las intensas lluvias, sobre todo en Alemania y en Bélgica, nos adelantan las consecuencias de no evaluar acertadamente los efectos de la dinámica y el cambio climático". El ecológo Alejandro Brown y María José Fouguet, de la fundación ProYungas, han dado a conocer un documento en el que plantean que es imprescindible que los gobernantes no usen el cambio climático para eximirse de sus responsabilidades y asuman que los desastres naturales muchas veces se deben a la falta de un ordenamiento territorial.

INUNDACIONES EN ALEMANIA. Están consideradas como la mayor catástrofe natural en ese país de las últimas décadas. INUNDACIONES EN ALEMANIA. Están consideradas como la mayor catástrofe natural en ese país de las últimas décadas. FOTO/REUTERS

Las imágenes de algunas regiones alemanas destrozadas por la furia del agua han causado sorpresa en todo el mundo. Y nos han demostrado que si bien los efectos del calentamiento van a sentirse con más fuerza en las regiones pobres (como América Latina), los países ricos no están excentos. "Jean Pascal Van Ypersele es un climatólogo que forma parte del Panel Intergubernamental sobre Cambio Climático (IPCC). Para él -citan Brown y Fouguet-, lo que ha pasado no puede explicarse sin tener en cuenta el desajuste del clima. Dice que, tal como vienen advirtiendo desde hace años, Europa va a ser afectada por episodios de fuertes lluvias y períodos de sequía intensa. Eso es un gran problema: en términos de infraestructura no se ha hecho ni se está haciendo nada para que se puedan soportar esas cantidades enormes de agua de una sola vez". Pero si en Europa carece de infraestructura hídrica, ¿qué nos espera a los tucumanos?

EN RANCHILLOS. Como consecuencia de una lluvia en enero de 2018, más de 300 personas tuvieron que ser evacuadas. LA GACETA/DIEGO ARAOZ EN RANCHILLOS. Como consecuencia de una lluvia en enero de 2018, más de 300 personas tuvieron que ser evacuadas. LA GACETA/DIEGO ARAOZ

Brown, director de ProYungas, toma la palabra y viaja en su cabeza hacia la zona sur de Tucumán, que suele sufrir las inundaciones más cruentas. "Normalmente, cada vez que nos inundamos se tiende a acusar al cambio climático y a la deforestación. Pero en realidad casi todas nuestras cuencas hídricas, sobre todo las medianas y altas, están muy bien conservadas. Incluso, muchas de ellas tienen hoy más bosques que 50 o 100 años atrás", explica el especialista. Ante este panorama, él apunta más bien al tendido de los caminos y de los postes y a los desarrollos urbanos o habitacionales. "Muchas veces están mal ubicados o diseñados. Entonces cuando ocurre algo, algunos se aprovechan, miran para arriba y hablan del calentamiento para expirar sus culpas", razona.

- ¿Cuáles son los efectos del cambio climático en Tucumán?

- Han comenzado a ocurrir tres cosas: primero, la torrencialidad de los ríos se ha incrementado debido a que llueve más; segundo, los períodos secos se han vuelto más largos; y tercero, las olas de calor se han hecho más frecuentes. Estos son los tres efectos directos del calentamiento global en Tucumán. Afortunadamente, la tradición agroindustrial de esta provincia ha favorecido, hasta ahora, la preservación de las cuencas. Pero se debe incluir a los terrenos bajos en ese manejo de cuencas. En el pedemonte, por ejemplo, la matriz productiva no ha preservado los bosques de ribera. Actualmente los cultivos llegan hasta los bordes de los ríos.

- ¿Qué hace falta para que Tucumán se desarrolle mejor?

- Creo que se debe trabajar en un ordenamiento territorial. La actualización de la Ley Provincial de Bosques ha sido un primer paso. Pero todavía queda por hacer, especialmente en el pedemonte. Planificar el desarrollo de la infraestructura, como barrios, caminos y puentes, y el restablecimiento de ciertas funciones ecológicas, como el funcionamiento de la dinámica hídrica, se imponen como prioridades.

- ¿Cómo debe ser esa infraestructura?

- Hay que prever infraestructura sobre los picos de intensidad; no únicamente sobre las marcas medias. El calentamiento hará que llueva con más intensidad. Se requiere una mirada conjunta del Estado.

- ¿Cree que los objetivos de desarrollo sostenible son tenidos en cuenta?

- Diría que no. Se los conoce... se los considera... pero no se los tiene en cuenta. A veces, las empresas globales del sector industrial suelen tomar algún objetivo y hacer cierto esfuerzo para que su desempeño responda a esa meta seleccionada. Pero los ODS son mucho más que eso: son la mirada en el cielo.

BAJO EL AGUA. Una de las imágenes más impactantes de una tormenta que en 2018 provocó inundaciones en Alderetes, Ranchillos y Banda del Río Salí, principalmente. LA GACETA/DIEGO ARAOZ BAJO EL AGUA. Una de las imágenes más impactantes de una tormenta que en 2018 provocó inundaciones en Alderetes, Ranchillos y Banda del Río Salí, principalmente. LA GACETA/DIEGO ARAOZ

En el documento conjunto de Brown y Foguet se mencionan algunas de las recomendaciones del experto del IPCC, quien, en líneas generales, indica que como medidas de adaptación hay que trabajar en el sistema de alcantarillado; en la gestión de los ríos; en la impermeabilización de los suelos para que puedan retener la mayor cantidad de agua posible y en la cobertura vegetal, para ampliarla. "Otro climatólogo, Wim Thiéry, de la Universidad Libre de Bruselas, explica que la atmósfera que se calienta puede contener más vapor de agua antes de saturarse. O sea que cuanto más se caliente, hay más riesgo de precipitaciones extremas. El aumento de 1ºC acrecienta en un 7% la capacidad de la atmósfera de contener agua", citan los investigadores.

Tanto Brown como Foguet consideran que por el momento no se puede decir con certeza que este evento esté relacionado directamente con el cambio climático, pero sí destacan que los modelos del calentamiento global predicen que estos fenómenos extremos se volverán cada vez más frecuentes y probables. "En Alemania, los ríos grandes no son tanto el problema porque son anchos. Se llenan de agua más lentamente y hay tiempo para prepararse. En cambio, son los pequeños los que provocan más problemas porque todo ocurre más rápidamente. Se emitieron advertencias, pero no se tomaron en serio. Y los preparativos fueron insuficientes", añaden los referentes de ProYungas, acudiendo a declaraciones de Hannah Cloke, profesora de hidrología en la Universidad de Reading, en el Reino Unido.

¿Serán estos ríos similares a los tucumanos? "León Merlot, un consultor belga de la Unión Europea, menciona que debemos pensar más activamente en soluciones basadas en la naturaleza. Y devolver a los ríos lo que es de ellos, aumentando las zonas de infiltración y acumulación de agua para reducir los impactos ante eventos extremos", responde Brown.

"Seguramente, correrá tanta tinta como agua al respecto. Lo importante es considerar a estos procesos como multicausales. Urbanizadores, desarrolladores de infraestructuras, responsables de recursos hídricos, productores, defensa civil, etcétera. Todos tienen una parte de la responsabilidad. Y, especialmente, una parte de la solución. En la Argentina, tendemos a buscar monocausas; a apuntar a un solo sector o actividad. Así, es más difícil hallar soluciones de fondo, como un ordenamiento territorial. Tenemos que saber dónde urbanizar, dónde construir caminos, dónde poner puentes, dónde producir y dónde dejarle lugar a la naturaleza para que cumpla su rol de amortiguadora de eventos extremos. Una vez más Europa nos avisó...", concluyen los investigadores.

Tamaño texto
Comentarios
Comentarios