Empate de la Selección: ahora habrá más días para mejorar la idea colectiva

El empate ante Colombia no podría haber sido más frustrante, claro está. Hasta ese último minuto fatídico, lo que venía pasando era positivo. En un torneo de las características de una Eliminatoria mundialista (que reúne a los jugadores como mínimo durante dos semanas por mes), el trámite era hasta casi ideal.

Para un seleccionador, los apuntes que debe tomar son múltiples. Muchos más que un director técnico de un equipo de liga de cualquier club. El trabajo que un entrenador de selección hace en pocos días para lograr la mejor versión de sus dirigidos, quien lo hace en un club tiene muchos más para realizarlo. Cuenta con mucha más disponibilidad de horas analíticas y la posterior práctica en la cancha, mucho más amplia también. Por eso, no hay tiempo para desperdiciar cuando se trata de competir con la camiseta de una selección. Ante Colombia, hubo mérito para poner el partido en “modo entrenamiento de alta calidad”. La Eliminatoria está casi en el punto medio (para ello aún quedan dos partidos pendientes). Lo hecho en la fecha 8 para Argentina debe instaurarse como el norte del equipo de Scaloni. Más teniendo en cuenta que el domingo comienza la Copa América y todos estarán juntos hasta el 10 de julio, si Argentina llega a la final. Será un lapso más que interesante para solidificar la mixtura de situaciones que supo aprovechar el DT argentino ante Colombia a partir de una actitud renovada, mucho más acorde a lo que debería haber pasado en Santiago del Estero siendo locales. El grupo salió con más autoridad en Barranquilla y construyó su burbuja donde pudo ensayar de todo, mostrando una idea colectiva que pueden ejecutar sin depender de Messi o de otros nombres rutilantes. Pero, obviamente, sin descuidarse en el final.