Por Alicia Liliana Fernández
09 Junio 2021
EL TRABAJO DEL ARTE. “Hay que aprovechar estos momentos para madurar las ideas artísticas”, opina Falú.
“Queridas amigas, queridos amigos: este 9 de junio presento mi disco ‘Reencuentro en el CCK’...”, abre su posteo Juan Falú en su red social.
Con la cabal tucumanidad que lo caracteriza, el maestro de la música le cuenta a LA GACETA de qué se trata. “En febrero di un recital en la Ballena Azul, el espacio del Centro Cultural Kirchner; un lugar realmente hermoso, una gran sala nacional, realmente muy necesaria”, dice con tono melancólico. Recuerda lo fuerte que fue para él volver a ese escenario tras un año sin shows en vivo, en plena pandemia, “con un una presencialidad con cierto protocolo muy cuidado (en esa sala para más de 1.000 personas el aforo era de la cuarta parte)”.
“Fue muy grato ver que el público también estaba muy ávido de lo mismo que uno, de recuperar el contacto. Fue un momento realmente muy emocionante -resalta-. Yo no estaba seguro de que se haya hecho un registro del audio, y cuando me enteré de que estaba hecho me pareció que valía la pena editarlo en forma de un disco”.
Algunos temas
“En ese recital reuní algunos temas que me acompañan desde hace mucho tiempo, con otros que compuse en pandemia. Por ejemplo, estrené una zamba con una hermosísima letra de Rubén Poli Soria, ‘La alpachireña’, que -como su nombre indica- está dedicada a Alpachiri”, explica.
De esta manera reeditaron la dupla Soria-Falú, “y ese afán por la zamba que tanto nos identifica a los tucumanos, que tanto amamos. Estrené entonces esta zamba y un par de temas más”. Pero lamenta no haber podido mostrar todo lo que hizo en pandemia: “la verdad es que compuse mucho, pero el recital por razones de protocolo estaba acotado en el tiempo, limitado a 40 minutos, y para uno es más o menos la mitad de tiempo que está acostumbrado a tocar. La cuestión es que fue un encuentro breve pero de alto voltaje. Esa es la síntesis que puedo hacer”.
Solista
En el CCK se presentó como solista. “Mi formato solista es el que más protejo, a pesar de que los encuentros que tuve en mi vida artística fueron realmente fundamentales”, reconoce. Y enumera, con temor de olvidar algún nombre, fructíferas asociaciones musicales con Liliana Herrero (foto arriba izquierda), Marcelo Moguilevsky, Jorge Marziali, Hilda Herrera y Chito Zeballos.
Clases virtuales
Entre otros haceres, como haber estado al frente de la Dirección de Asuntos Culturales de la Cancillería Argentina (cargo al que renunció en abril de este año para dedicarse a pleno a la música), en 2020 Falú dictó clases en la Universidad Nacional de San Martín donde dirige la Licenciatura en Música Argentina, cuya creación él impulsó.
“Aprendí a dar clases virtuales, a manejar plataformas. Fue una experiencia muy importante porque pudimos salvar el año lectivo, como lo hizo toda la docencia. También me ayudó a organizarme porque todo tenía que estar muy preparado. Tuve que dejar de lado la espontaneidad que me caracterizó siempre al dar mis clases con mi guitarra, con la cual me siento seguro. Esta nueva situación me obligó a organizarme bien, a proveer a los alumnos un plan, un temario, en fin, todo lo que sería lo normal -ironiza-. Y este año, el tema clases sigue del mismo modo”.
“Mojones” y “Cantata”
Es evidente que la pasividad pandémica no lo ganó a Falú. “Hice un trabajo con Liliana Herrero y Teresa Parodi, con la participación de Horacio González en los textos, que iba a ser estrenado el 25 de Mayo en el CCK”, comenta.
“Se llama ‘Mojones’ porque elegimos algunas señales, esos mojones en la historia de esta tierra”, explica.
Como ejemplos, señala “el canto originario; el Cruce de los Andes; la Plaza de Mayo; el gaucho; la muerte de Facundo Quiroga; los que no están; los ídolos populares; el pañuelo como símbolo de la cultura nacional -el pañuelo de las madres, el pañuelo de la zamba-. Tomamos estos mojones y empezamos a componer temas entre Teresa y yo a partir de esta idea original de Liliana, y acompañado de las palabras de Horacio (que ahora le está dando una batalla al coronavirus)”.
“Mojones” se integra con 10 temas que se intercalan con los textos, con diversos ritmos del folclore argentino: hay zamba, bailecito, vidala, chamamé, candombe, tango. “Estamos esperando que esta obra, que está terminada, pueda ser mostrada. Este es uno de los trabajos más importantes que hice en pandemia. Le falta el moñito nomás, así que estamos expectantes con el futuro estreno”, destaca.
“Antes de la pandemia, con Soria hicimos la ‘Cantata Tucumán’, que pudimos mostrar en la provincia y teníamos mucha esperanza de replicarla por todo el país, pero se vino la pandemia”, lamenta, pero resalta cuántas cosas tiene “en la gaveta, para retomar la actividad plenamente”.
Falú celebra sus dos dosis de vacuna china contra el covid ya colocadas, y ante comentario de que está fuera de riesgo, sentencia: “nunca estamos fuera del riesgo de la locura, por suerte; tampoco de la angustia, pero bueno, esos son motores también”.
Otra normalidad
Acerca de cómo espera la vuelta a alguna normalidad, está seguro de que va a ser “otra normalidad seguramente; vamos a ver cómo lo sabemos aprovechar colectiva y personalmente”.
Y a la pregunta de qué les diría a los artistas en este momento, responde: “para el tema laboral no tengo otra respuesta que acudir a la solidaridad tanto pública y estatal como a la social. Y desde el punto de vista más íntimo y creativo, hay que aprovechar estos momentos para madurar ideas artísticas. Es un tiempo muy interesante para dejar de lado todo tipo de superficialidad y meterse en las profundidades de la existencia de la vida de uno mismo, y que de ahí salga la obra de arte, a partir de la introspección”.
En la red social el posteo de Falú termina así: “La guitarra sigue sonando. Espero que este disco pueda acompañarlos en este difícil momento, y en cualquier momento. Muchas gracias”.
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