El informe de Lichtmajer es analizado por un grupo de expertos nacionales

La calma no llegó al río, pese a que, superficialmente, las aguas políticas del oficialismo parecen tranquilas. Este fin de semana ha sido de reflexión, pero también de análisis de situación y de los pasos que se darán a partir de la visita que el ministro de Educación, Juan Pablo Lichtmajer, ha realizado, la semana pasada, a la Legislatura. Las 27.000 fojas del informe, que está depositado en la Dirección de Comisiones de la Cámara, presentado en el recinto por el funcionario del gabinete provincial se encuentra a disposición de los legisladores, independientemente de que pertenezcan o no a las comisiones internas de Asuntos Constitucionales e Institucionales o de Educación.

El titular de Asuntos Constitucionales, Javier Morof (del jaldista bloque Justicialista para Todos), había dicho que se facilitará lo digitalizado a todos sus pares del Parlamento, pero aclaró que la documentación física no podrá ser retirada de la sala donde se la acomode. En principio, la idea de los legisladores es que el análisis del informe arranque mañana mismo, una tarea quede demandar semanas. Luego de ese estudio, se emitirá un dictamen para definir si se aprueba o no en la próxima sesión, que todavía no tiene fecha de convocatoria.

El "informe Lichtmajer" no sólo recorrerá el camino legislativo. El gobernador Juan Manzur solicitó a sus colaboradores que esas 27.000 fojas, en formato digital y también físico, sea remitido a Buenos Aires para su estudio. Puntualmente, el Poder Ejecutivo lo remitió el Ministerio de Educación de la Nación, con el fin de que luego sea puesto en consideración por un comité de expertos nacionales seleccionados por la cartera que conduce Nicolás Trotta. "Varios de los convocados tienen prestigio no sólo nacional, sino también internacional. Nuestra idea es que el diagnóstico cuente también con una opinión independiente de la política y más cercana a lo catedrático, con el fin de que la sociedad tenga una mirada más amplia de la cuestión", indicó un funcionario cercano al gobernador.

Si bien en la Casa de Gobierno intentan mostrar que esa opinión de analistas de la educación persigue un fin meramente académico, no se puede soslayar que también se busca una suerte de aval externo, si es que la Legislatura rechaza lo presentado por el ministro de Educación de la provincia.

La interna oficialista ha ingresado en un terreno menos tormentoso. Según trascendió en uno y en otro poder, ya se tendieron algunos puentes con el fin de que, en los próximos días, se produzca un contacto directo entre el titular del Poder Ejecutivo y el presidente de la Legislatura, Osvaldo Jaldo. Manzur mantiene aún una postura cerrada, tras lo que considera un duro golpe a la gestión el hecho de que uno de sus miembros del gabinete haya sido interpelado, el jueves último, no sólo por la oposición parlamentaria, sino también por legisladores peronistas. Ese mismo día, el gobernador convocó a varios ministros del gabinete del presidente Alberto Fernández, que no sólo lo respaldaron, sino también que revelaron que el mismo Manzur mantuvo, hace dos semanas, un encuentro con la vicepresidenta de la Nación, Cristina Fernández de Kirchner, tal como lo dijo el ministro del Interior, Eduardo "Wado" de Pedro. Ese respaldo de la Casa Rosada a uno de los vicepresidentes del Consejo Nacional Justicialista repercutió en varios de los legisladores que ocupan el espacio jaldista, que intensificaron sus contactos no sólo con sus pares, sino también con algunos funcionarios del Ejecutivo.

Jaldo, días pasados, se había mostrado predispuesto al diálogo institucional con Manzur, a la vez que aclaró que no se pondrá palos en la rueda a la gestión provincial, a la que aún le resta dos años y medio de mandato. Manzur, mientras tanto, sigue tejiendo alianzas a nivel nacional y hablando con funcionarios del gabinete federal, sin dar pistas acerca de un probable encuentro con su compañero de fórmula. Lo que sí se dice en el Palacio de Gobierno es que, si se llega a dar, no será inminente.