Cartas de lectores I: Chichina Ferreyra

Además de ser bióloga, historiadora, miembro de número de la Junta Provincial de Historia de Córdoba y académica de número de la Academia Argentina de Genealogía y Heráldica fue una gran investigadora de nuestra historia colonial. Excelente persona fallecida recientemente, no obstante provenir de una de las familias más aristocráticas y ricas de Córdoba que fuera dueña del Palacio Ferreyra, era de una gran sencillez, generosidad, sentido del humor, amor a su familia y a la vida. En sus viajes a Tucumán y en los míos a Córdoba, con motivo de nuestros encuentros por temas de Genealogía y de Investigación Histórica, cimentamos una muy buena relación. Es una injusticia el hecho de que sea más conocida por haber sido la novia del Che Guevara que por todas sus virtudes y méritos. Cualquiera que tuviera un encuentro con ella le preguntaba ineludiblemente por su noviazgo con el Che, aunque en mi caso particular nunca lo hice al cabo de tantos años de conocerla y quizás por ello me distinguía con su amistad. En mi último viaje a su ciudad me invitó a almorzar pero más que nada para que conociera su magnífica biblioteca, realmente una muestra de gran gusto, cultura y encanto. Me regaló uno de sus libros. Al final, al despedirnos adiviné en su mirada algo así como “por qué nunca me hiciste la pregunta que todos me hacen”.

Celia Avellaneda de Ibarreche

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