Del miedo al hartazgo, las emociones de los médicos durante la pandemia

Del miedo al hartazgo, las emociones de los médicos durante la pandemia

Médicos se quejan por el pluriempleo y dicen que hubo renuncias. ¿Cómo enfrentar así la segunda ola?

Del miedo al hartazgo, las emociones de los médicos durante la pandemia

Después de meses muy difíciles, los médicos en Tucumán se sienten cansados. Aseguran que se encuentran preparados para enfrentar la segunda ola, pero todavía quedan muchas cosas sin resolver. Tienen algo a su favor: un año frenético por detrás como experiencia.

La gota que rebalsó el vaso fueron las declaraciones del presidente, Alberto Fernández, la semana pasada, de las que todavía no se reponen. De nada sirvieron las disculpas públicas del primer mandatario porque, en el fondo, el reconocimiento que reclaman es otro: salarios dignos, elementos de protección, respeto por su trabajo y mayor incentivo para la formación de profesionales de la salud.

El problema principal es la cuestión salarial. Si en algo coinciden es en que están mal pagados y esa realidad los obliga a sumirse en un “poliempleo” desgastante.

Esas condiciones han hecho, según explica el cirujano Juan José Domínguez, que muchos profesionales abandonen el sistema público de salud. Algunos han renunciado, otros piden licencias o se acogen a la jubilación. “Hay muchos que han renunciado al sistema, porque no ven las condiciones o se los ha exigido. Ha pasado que se obligue a muchos colegas a cubrir turnos en consultorios febriles bajo amenazas. Eso se repite en todo el sistema”, dispara Domínguez. “Ante este panorama lo que vemos es que hay menos profesionales para atender la pandemia”, agrega.

¿Cómo podemos consolar al que sufre, si nosotros estamos en una situación lamentable?, se pregunta Adriana Bueno, del Sindicato de Trabajadores Autoconvocados de la Salud de Tucumán (Sitas). La infectóloga reconoce que aunque un porcentaje del personal ha recibido la vacuna o está por hacerlo, la intranquilidad sigue latente.

“En esta segunda ola volvemos a ser un factor de riesgo para nuestras familias”, dice. “Además venimos siendo muy maltratados y el sistema ante nuestros reclamos responde inventando causas, realizando sumarios, trasladando personal y persiguiendo a los médicos. Es un absolutismo terrible”, se queja.

Ayer la ministra de Salud, Rossana Chahla, se refirió al conflicto planteado con Sitas y fue contundente. La funcionaria consideró que los trabajadores de la sanidad tienen derecho a concretar medidas de fuerza, pero advirtió: “no es el momento oportuno”. Además, dijo que no le parece justo que cobre lo mismo quien trabaja que quien no lo hace.

La pandemia ha puesto de manifiesto viejos problemas que permanecían dormidos. La formación de los profesionales es uno de ellos. El ritmo furioso que impuso el coronavirus en los hospitales obligó a los médicos a cumplir con funciones que nunca antes habían ejercido, aunque su especialidad sea otra.

“La parte formativa se ha visto resentida por la pandemia”, dice Eugenio Lobo, ex director del Hospital Padilla, que cuenta con más de 50 años de servicio en el sistema público de salud. “Hay muchos alumnos de medicina que no han podido desarrollar sus prácticas finales, lo mismo que los residentes. Y los resultados los veremos en poco tiempo cuando notemos una carencia de profesionales capacitados”, agrega.

El médico cardiólogo advierte que no todas las especialidades son iguales y que en algunos puestos es clave contar con recursos humanos formados. De eso depende la vida o la muerte de un paciente. “Hay especialidades que son críticas, como los terapistas. Uno puede decir vamos a mejorar una terapia y triplicar la cantidad de respiradores, pero quien maneja esta tecnología es el médico terapista. Un mal manejo de un respirador puede ser peor que no tenerlo, incluso llevar a la muerte a un paciente”, recapacita.

Los residentes comparten ese razonamiento al ser los más perjudicados. Esta semana los trabajadores del Hospital de Niños dijeron basta y salieron a la calle a protestar.  “Desde el inicio de la pandemia, el 20 de marzo, trabajamos de manera continua para covid y no covid, ya que tenemos patologías diversas”, se quejó Sofía Medina, vocera del grupo en una entrevista en LGPLAY.

Según explicaron, las autoridades de Salud les piden realizar guardias y atención de pacientes adultos, cuando su formación es en pediatría. “A eso se suma que trabajamos en guardias de 12 horas dos veces a la semana ante el incremento de los casos en la provincia”, resumen.

Comentarios