18 Abril 2021
PRESTAR ATENCIÓN. Los profesionales recomiendan analizar y comparar el contenido nutricional de los productos que se consumen. FOTO DE ARCHIVO.
Para tener una buena alimentación indudablemente es importante saber qué productos se consumen. Sin embargo, en muchas ocasiones las personas ya sea por falta de tiempo o costumbre no prestan atención a la etiqueta nutricional de los productos que se van a adquirir.
"El 73% de los argentinos y argentinas no lee las etiquetas y del 27% que miran, solamente el 13% entiende", indicó la médica, Norma Pizza, de la Sociedad Argentina de Pediatría, durante las reuniones informativas sobre la ley de etiquetado de alimentos en el país.
El etiquetado es una fuente de información necesaria para los consumidores. Conocer los componentes como el sodio, grasas saturadas, grasas totales y calorías son fundamentales a la hora de elegir un producto.
Según indicó el médico pediatra especialista en nutrición, Eduardo Luis Bossi, la información que nos brinda la tabla nutricional es una herramienta de "prevención" para la salud.
"El etiquetado de los productos tiene como finalidad educar a los consumidores. Ayuda a las personas a realizar mejores elecciones, más saludables y convenientes (caso de personas con patologías) a la hora de comprar un alimento", explicó.
Coincide con él, Claudia Victoria Ruíz, licenciada en nutrición. "Es muy importante leer los componentes de la tabla nutricional del producto que vamos a adquirir. A través de ellos vamos a poder conocer qué le estamos dando a nuestro cuerpo. Si una persona busca tener una alimentación saludable o quiere evitar alimentos que tengan grandes cantidades de gluten, aditivos o conservantes es necesario prestar atención a la etiqueta".
Los profesionales de la salud recomiendan tomarse por lo menos unos minutos cuando se realiza la compra en el supermercado para poder comparar un mismo alimento de distintas marcas y así poder seleccionar el más adecuado.
"La tabla informa la cantidad de sal, grasas y los conservantes que se usan. A esos datos hay que prestarle atención", detalló Bossi.
La falta de lectura de la etiqueta informativa de un producto es un tema cultural. Ruíz explicó cuáles son los puntos que tenemos que prestar atención a la hora de analizar una etiqueta. "En primer lugar, lo primero que aparece en la tabla son los nutrientes que más contiene el producto. Es decir, los macronutrientes (hidratos, proteínas y grasas). En segundo término, las vitaminas y por último los minerales".
"Siempre que analizamos debemos tratar de buscar productos que tienen grasas trans y prestar atención a la cantidad de sodio que aportan. No todos los productos van a tener el equilibrio adecuado, pero si se comparan y uno por ejemplo tienen más proteínas y menos sal es recomendable el que mayor aporte de proteínas posee. Es decir, cuando comparamos debemos tratar que de los cuatro componentes de la tabla dos estén adecuados".
La especialista sostiene que los consumidores deben estar atentos y no dejarse llevar por los productos que tienen la consigna "ligth" porque en ocasiones tienen otros componentes que son perjudiciales para una alimentación sana.
"Muchas veces las empresas venden ciertos productos o alimentos como 'light'. Pero al sacarle grasa se agregan componentes para darle sabor y se suele agregar sal, por ejemplo en el caso de los quesos untables", detalló Ruíz.
Por último, ambos profesionales reiteraron que es necesario acostumbrarse a comparar y analizar el contenido nutricional de los productos para acostumbrarse a adquirir el más conveniente para una alimentación saludable.
"Detenerse y ver que vamos a llevar es necesario. Hay que reeducar y hacer conciencia", concluyó Ruiz.
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