“La vacuna no garantiza que no vayamos a contagiarnos”

Habían pasado pocos minutos desde que el presidente Alberto Fernández ayer, a las 0.9, anunciaba que se había realizado un test de antígeno positivo para que la pregunta comenzara a repiquetear en redes sociales y charlas de café: ¿pero él no se había vacunado? Incluso, varios de los títulos que en versiones online es escribieron con la velocidad de un reguero de pólvora advertían esto: “Fernández dio positivo para Covid a pesar de haberse vacunado? Y la duda ganó la calle. ¿No era que con la vacuna uno quedaba inmunizado? Y la pregunta para esa pregunta la responden con criterio los especialistas: no.

El 21 de enero el presidente fue vacunado con la primera dosis de la vacuna rusa Sputnik V en el Hospital Posadas. Y recibió la segunda dosis 21 días después, el 11 de febrero. Según dice en su propia página el instituto ruso Gamaleya, la vacuna Sputnik V es “91,6% eficaz contra infecciones y 100% eficaz contra casos graves”. Es decir que, si se da el contagio, la vacunación garantiza una recuperación rápida sin síntomas graves, lo que permite reducir la circulación de la enfermedad, las hospitalizaciones y muertes relacionadas con el COVID-19.

Así lo entiende la infectóloga tucumana Aída Torres, la vacuna no garantiza que uno no se contagia. “Garantiza que no sea más grave o que requiera la internación en terapia intensiva. Es cierto que las personas de más de 60 años tienen más riesgos, pero igual estos disminuyen si ya tiene colocadas las respectivas dosis”, indicó la experta. “Un punto a tener muy en cuenta es que el vacunado, además de contagiarse, tiene la capacidad de contagiar. La cepa se pega por igual y es por eso que deben guardar todos los cuidados correspondientes justamente por el peligro de ser propagador del virus”, agregó.

Para hacer un paralelismo, Torres aseguró que con la vacuna contra el coronavirus pasa lo mismo que con la de la gripe. “Son vacunas que mitigan las consecuencias, que evitan internaciones, que evitan muertes. Pero el vacunado perfectamente puede contagiarse. Es una vacuna muy nueva todavía, y no tiene aún la variante que sí podría tener la del neumococo que produce una inmunidad total”, dijo. Y finalizó que además hay que tener en cuenta un factor genético. “No todos somos iguales, y cada uno puede tener distintos efectos. No queda otra que cuidarnos”, afirmó.

Con ella coincidió también el infectólogo Juan Manuel Núñez. “La efectividad de la vacuna en términos de contagios es baja, ya que no es su punto fuerte. Lo que hace es prevenir las formas graves y la mortalidad del coronavirus, en lo que tiene una eficacia mayor al 90%”, aseveró. “Son vacunas excelentes, con altísimos niveles de efectividad, que disminuyen la internaciones que tantos problemas generan en el sistema de salud. Por eso es tan importante vacunarse, justamente para bajar las hospitalizaciones”, dijo.

“Lo que sucedió con el presidente es lo mismo que le puede haber pasado a cualquier otra personas. Por eso no debemos dar paso a no bajar la guardia en términos de prevención, No hay que relajarse. La vacuna no implica el no uso de las pautas de prevención, todo lo contrario, nos tiene que dar un empujón al uso de todas las medidas de prevención ya que aun vacunados podemos infectarnos”, aseveró Núñez. “Una vez vacunado te podés contagiar y podés contagiar, aunque tengamos una carga viral menor. Con personas vacunadas las medidas de prevención son las mismas que ya venimos repitiendo desde el año pasado”, explicó. Con respecto a la situación sanitaria, el especialista afirmó que “da mucho miedo ver la curva ascendente”. “Hay cada vez más infectados y el índice de duplicación es cada vez más alto. Hay mucho temor de que siga creciendo de esta manera. Vemos que los jóvenes se están contagiando mucho y ellos a su vez contagian. Eso ya se está viendo en las salas de terapia intensiva, con muchos más casos”, finalizó.