Con la ayuda de los fieles se puede salvar a San Francisco

Cada cascarita que se desprende de los murales del templo y convento San Francisco es un pedazo de historia que ya no podrá testimoniar el pasado de Tucumán. El trabajo para recuperarlo es titánico, en esfuerzos y en recursos. La municipalidad comenzó ya las obras de seguridad y protección para poder reabrir la iglesia clausurada en agosto de 2018 por el peligro que representaba. Pero hay otros aspectos de restauración y recuperación del patrimonio artístico que necesitan del aporte económico de los tucumanos para llevarse a cabo.

A la par de las de la municipalidad, la Comisión del Patrimonio Cultural de Tucumán se encarga del mantenimiento edilicio y de la recuperación de las piezas artísticas, además de colaborar con la municipalidad en estudios. Desde 2019, y aún en plena pandemia, la comisión se ocupó de las tareas menos visibles pero vitales para la supervivencia de un edificio, como reparación de cubiertas, desagües, sellado de grietas, aplicación de herbicidas y otras vinculadas a la arquitectura para evitar el avance del deterioro. Todo eso se hizo con fondos de la comunidad conseguido a través de donaciones y de bonos que se vendían en la secretaría del templo, y con dinero de la Orden Franciscana de Frailes Menores, explica la presidenta de esa comisión, la arquitecta Olga Paterlini de Koch.

Para la próxima etapa de mantenimiento, que incluye la restauración de cubiertas y desagües del convento, y estudios de diagnóstico para avanzar en otros proyectos, la comisión (integrada también por los arquitectos Ana Lía Chiarello y Andrés Nicolini, entre otros) necesitará un presupuesto de entre $ 10.000.000 y $ 20.000.000, con el que hasta ahora no cuenta. Aunque, la realidad, es que las obras avanzan a medida que se obtienen algunos recursos.

El provincial de la Provincia Franciscana de la Asunción de la Santísima Virgen del Río de la Plata, fray Emilio Andrada, envió una carta reconociendo el invalorable trabajo que realizan la municipalidad, a través de su intendente, Germán Alfaro, y la comisión que preside Paterlini, y también agradece a todo el pueblo tucumano que sumó su aporte para la restauración del patrimonio.

Además del mantenimiento, hacen falta recursos para continuar con la restauración de las obras artísticas a cargo de la licenciada Beatriz Cazzaniga, y las investigaciones arqueológicas. Hay que tener en cuenta, también, que antes de avanzar en proyectos de recuperación se deben hacer estudios muy costosos, como los análisis de suelo y de comportamiento estructural del templo para realizar su consolidación integral y estudios de factibilidad para la reutilización de los claustros y otros espacios.

Para ayudar en la recuperación del histórico templo y convento de San Francisco se puede hacer un depósito bancario en la cuenta del Banco Galicia, está a nombre de la Provincia Franciscana de la Asunción. Es la cuenta corriente Nº 18477-9089-2, CUIT 30-62381015-8, CBU 0070089420000018477920.

En su carta de agradecimiento, fray Andrada resalta que lo trabajos de la municipalidad que permitirán abrir el templo se iniciaron a días de la beatificación de fray Mamerto Esquiú, por un milagro acontecido en una niña tucumana.