Por Marcelo Androetto
31 Marzo 2021
ALGUNOS ESTÁN, OTROS NO. En la foto, Ignacio Fernández cae en el área ante la entrada de Leonardo Heredia, durante el último partido entre ambos, en marzo de 2020. “Nacho” se fue y “Pupa” sigue.
Con sede y horario ya confirmados, River aguarda por Atlético con un objetivo claro por club: del lado del “Decano”, producir el batacazo de 2021 y del “Millonario”, no faltar a una nueva cita con sus “primos” de Boca, esta vez en octavos de final de la Copa Argentina.
El premio que estará en juego exactamente dentro de una semana, el miércoles 7 desde las 20.30, en el Estadio Único de La Plata, será trascendental para ambos. El “Decano” sueña con un final distinto al de aquella definición de 2017 en que el “Millonario” le truncó la ilusión de ganar la Copa.
¿Cuál es el River que medirá fuerzas con las huestes de Omar De Felippe? Un equipo ciclotímico, poderoso pero irregular, capaz de aplastar rivales, así como de no descifrarlos jamás, y cuyo andar se asemeja a un electrocardiograma, con registros de subas y bajas, bruscas y constantes.
Un conjunto que desconcierta, porque es capaz de pasar del 6-1 a domicilio frente a Godoy Cruz a un empate en cero frente a un temeroso Racing en el Monumental la siguiente fecha (tal como antes había pasado del 5-0 sobre los jugadores de Juan Antonio Pizzi por la Supercopa al 0-1 en casa frente a un Argentinos Juniors todavía virgen de puntos, unos pocos días después).
¿Cuál es el verdadero rostro del “Millonario” que verá Atlético? Quizás ambos. En realidad, el River Modelo 2021 ya lució varios desperfectos, más allá del modesto kilometraje recorrido durante estos tres meses en cuatro copas (Libertadores, Diego Maradona, Argentina y Liga Profesional).
Abajo, más allá de la seguridad que recrea Jonatan Maidana, el bólido de Marcelo Gallardo está siempre proclive a pegarse un “tortazo” (mucho más si lo atacan vía aérea y/o con pelotas cruzadas).
En el mediocampo, echa de menos a su rendidor motor (Ignacio Fernández). Y no ha logrado volver a calibrar bien su sistema de frenado (desde 2019, con la partida de Exequiel Palacios a Alemania).
Arriba, el “Millo” padece la falta de un delantero-goleador, más allá de las ocasionales “aceleradas” hacia la red contraria del colombian Rafael Santos Borré, ya con un pie afuera de la institución.
A River lo están complicando muchísimo los rivales que se le meten atrás. La “Academia”, con línea de seis atrás, lo metió en un embudo infértil: a los muchachos de Gallardo, en esos casos, suelen faltarle recursos en el menú tales como agregar velocidad a la precisión, potencia en el área, gambetas para desequilibrar y ni hablar de media distancia (casi nadie le pega de afuera, un botón de muestra: todos los goles al “Tomba” fueron desde dentro del rectángulo grande).
Está claro, con espacios, el “Millonario” podría lastimar a cualquiera. ¿Lo podrá evitar Atlético? A una semana del choque, y con los partidos del sábado de por medio (el “Decano” en Junín frente a Sarmiento, River ante Arsenal en el Viaducto), la cuestión pasa por saber si el equipo de De Felippe podrá equilibrarse y dejar atrás su propia arritmia: tiene poder de fuego cuando ataca, pero es muy endeble a la hora de defender (el 2-2 con Newell’s lo atestigua con claridad).
Con Ricardo Zielinski, el “Decano” se convirtió en una de las “bestias negras” de Gallardo. ¿Se permitirá De Felippe parecerse un poco más al “Ruso” de lo que viene haciendo, aun si para eso debe traicionar un par de ideas, para que el electrocardiograma de River vuelva a exhibir una flecha indicando el piso?
Esa es la pregunta del millón. Que el “Millonario” muestre su mejor o peor cara, mucho depende de lo que pergeñe y realice su rival, en este caso Atlético.
Otro lunes
Luego de visitar a Sarmiento y chocar con River en la Copa Argentina, Atlético recibirá a Vélez, por la Copa de la Liga Profesional, el lunes 12 de abril, desde las 21.15.
Día de trabajo
El plantel se entrenó por la tarde en Ojo de Agua. Hoy, lo hará por la mañana, pensando en el duelo del sábado (16.15) ante Sarmiento (dirigirá Leandro Rey Hilfer).
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