Un experto en grooming visitó la provincia para capacitar e implementar la nueva ley 27.590

Un experto en grooming visitó la provincia para capacitar e implementar la nueva ley 27.590

Braian Arroyo capacita a grupos de trabajos que serán los encargados de concientizar acerca del ciberacoso en cada jurisdicción.

PALACIO DE LAS AGUAS CORRIENTES. Nicolás Trotta, ministro de Educación, y miembros de Mamá en Línea posan con carteles en contra del grooming. PALACIO DE LAS AGUAS CORRIENTES. Nicolás Trotta, ministro de Educación, y miembros de Mamá en Línea posan con carteles en contra del grooming.

Se promulgó la Ley Nacional 27.590, conocida como Ley Micaela Ortega, en referencia a la niña de 12 años que desapareció el 23 de abril de 2016, luego de encontrarse con un hombre que usaba diferentes cuentas de Facebook, a través de las cuales se contactaba con niñas. Varias semanas después, Micaela fue encontrada sin vida en Bahía Blanca. El objetivo de la norma es prevenir y concientizar a la sociedad acerca de la problemática del grooming o ciberacoso. Por esto, desde Buenos Aires -donde se sancionó- enviaron un responsable de coordinar la implementación de la ley en cada provincia.

Braian Arroyo, encargado de esa tarea, pasó por Tucumán en los últimos días y habló con LA GACETA sobre su objetivo en la provincia.

Para empezar, Arroyo elige definir qué es el grooming y, a partir de ahí, comenzar a concientizar a la gente sobre sus posibles consecuencias y cómo evitarlo. “El grooming es la acción deliberada de un adulto, varón o mujer, de acosar sexualmente a una niña, niño o adolescente a través de un medio digital, como pueden ser las redes sociales, correo electrónico, mensajes de texto o juegos en línea, siendo la antesala de delitos como el abuso, la explotación sexual e incluso la muerte. Esa es una definición simple, que puede llegar a la gente”, dijo Arroyo, coordinador de proyectos de investigación del Instituto de Políticas Públicas de Prevención de Grooming de la Cámara de Diputados de Buenos Aires.

Visita a Tucumán

Arroyo vino a la provincia para trabajar en el desarrollo e implementación de la ley, pero al llegar se encontró con un dato no menor: Tucumán ya tiene una ley (la 8.899) similar. “Es una oportunidad para que reflote el tema y hacer funcionar ambas leyes”.

Otra de las razones por las que vino -y por lo que deberá viajar al resto de las provincias del país- es para llevar a cabo un proyecto de coordinación de capacitaciones. El equipo de expertos con el que viaja tendrá la tarea de capacitar a “formadores de formadores”. “Básicamente se trata de ir a una provincia, formar un equipo y a partir de ese momento, ese grupo será el encargado de formar al resto de la provincia. De esa manera vamos una sola vez y después sólo actualizamos en caso de ser necesario”, explicó el joven especialista.

Además, esa capacitación no está destinada únicamente al equipo de formadores, sino también a policías que necesitan el conocimiento para tomar las denuncias y trabajar el delito, y a agentes de la Justicia para realizar correctas investigaciones sobre hechos de este tipo.

En su visita, el experto también se reunió con Claudio Maley, Ministro de Seguridad, para discutir de qué forma se va a adherir Tucumán a la ley y cómo trabajar para generar concientización, según dijo Arroyo a LA GACETA.

Prevención

En cuanto al modo de evitar este tipo de acoso cibernético, el especialista afirmó que la clave está en conocer el tema. Los padres juegan un rol fundamental para luchar contra este delito.

“No me sirve tener miles de investigadores expertos estudiando el tema si el crimen ya se cometió y se siguen cometiendo. La idea es que lo erradiquemos mediante la concientización, que los padres sepan qué es, cómo cuidar a los chicos en cuanto al uso de las tecnologías y que los niños y adolescentes comprendan los riesgos que tiene el uso y manejo de los dispositivos digitales en general”.

Por último, Arroyo hizo referencia a la importancia que tiene para él esta lucha: “la protección de las niñas, niños y adolescentes es responsabilidad de todos, y es parte del despertar ciudadano involucrarse en la lucha de este flagelo que afecta a los más vulnerables de la sociedad. Hoy tenemos una ley que pena el delito, pero si el delito ya fue cometido, significa que llegamos tarde. Por esto, es necesario que todos seamos voceros de la prevención, para que no tengamos que lamentar más víctimas”.

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