Barrio Bajo Hondo: le quebraron un dedo para robarle la bicicleta

Juan Palacios sufrió un violento robo cuando volvía a casa. El biker había pinchado una rueda y volvía caminando con su rodado cuando una pareja de motochorros lo interceptó en las cercanías de San Martín y Olazábal, en barrio Bajo Hondo. “Fue todo difuso, me atacaron el domingo cerca de las 20. Por la adrenalina del momento hay cosas que no recuerdo con tanto detalle. Reaccioné y le tiré una patada al ladrón pero me sacó un arma. Me sacaron la bici y me dieron un culatazo en la mano: me rompieron la falange del dedo”, señaló el hombre, haciendo memoria de lo sucedido y señalando el yeso que llevaba puesto en su brazo izquierdo. La bicicleta robada es una Specialized Rockhopper color naranja flúor.

Palacios llegó a casa y de allí lo llevaron a un sanatorio debido al dolor de la lesión. Según cuenta, debió pasar la noche internado porque tuvo que someterse a cirugía para que los médicos pudieran acomodar el dedo de su mano. “Además de perder la bici me hicieron un gran daño, esto me afecta en mi actividad laboral, en lo personal y en lo económico; no puedo manejar para ir al trabajo y estoy gastando mucho en taxi para moverme y hacer los trámites del sanatorio, obra social y de la denuncia”, enfatizó. Aún no le confirmaron el tiempo que deberá utilizar yeso.

El denunciante planteó además la lentitud burocrática para la toma de medidas judiciales. “Me preocupa porque pasan los días y la bici ya puede estar vendida por dos ‘mangos’ en las redes. Lamentablemente hay gente que se prende en comprar cosas así. Tengo amigos bikers que me están ayudando a compartir en las redes la foto para que si alguien la ve nos avise”, indicó.

Una pista

El lunes, apenas dado de alta, Palacios regresó a casa. Volvió a pasar por el lugar del robo y se bajó a ver. Allí encontró un teléfono celular y un documento (tras la funda del móvil) en el pasto de la vereda y recordó otro detalle del asalto. “Durante el ataque, al ladrón se le había caído algo que no había podido precisar qué era. Tuve la suerte de que por el feriado no pasó tanta gente, que nadie lo encontró antes. Estoy seguro de que el celular es del ladrón y que tiene datos para dar con ellos”, aseveró. En la tarde de ayer iba a entregarlo a la Unidad Fiscal de Robos y Hurtos II para que lo analizaran.

“En la seccional 7a me tomaron la denuncia, se mostraron con muy buena predisposición, pero si esta pista es certera, necesitamos que se ordene un allanamiento rápido, antes de que los ladrones se deshagan de la bici”, concluyó.