Por Camila Carceller
22 Noviembre 2020
La actividad física es necesaria y muy beneficiosa para la salud de todos los seres humanos, sobre todo para los adultos mayores que, en general, van mermando sus tareas con el correr de los años. Cuando hablamos de actividad, no nos referimos necesariamente al deporte sino a cualquier acción que ayude a gastar energía como quehaceres de la casa por ejemplo, o pasear el perro o simplemente salir a hacer las compras a pie.
Según las edades, la Organización Mundial de la Salud recomienda cierta cantidad de minutos semanales de ejercicio: de cinco a 17 años, lo ideal es realizar 60 minutos diarios -al menos- de una actividad vigorosa (deporte); de 18 a 64, 150 minutos semanales de actividad moderada (caminata) o 75 minutos de actividad vigorosa (deporte); para mayores de 65 la recomendación de minutos es la misma que el grupo anterior pero resalta la importancia de realizarla tres días a la semana para mejorar el equilibrio y evitar las caídas.
Los beneficios de estar activo son múltiples: reduce el riesgo de cardiopatías coronarias y ACV, diabetes, hipertensión, diferentes tipos de cáncer y depresión; mejora la salud ósea y funcional; mejora el buen funcionamiento del sistema muscular y cardiorespiratorio. Además es fundamental para el equilibrio calórico y un buen control de peso.
En conclusión, ahora que están habilitadas las plazas y parques, salí de casa -con todas las medidas de seguridad- y caminá algunas vueltas a la manzana. No te quedés quieto porque el sedentarismo puede ser contraproducente.
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