11 Noviembre 2020
ELECTO. Biden durante la rueda en que apoyó el Obamacare. reuters
WASHINGTON.- Joe Biden, presidente electo de Estados Unidos, calificó de vergonzosa la negación de Donald Trump a aceptar el resultado de los comicios de la semana pasada, pero transmitió que la transición de Gobierno está, aun así, encaminada. Según el demócrata, el ala moderada del Partido Republicano prevalecerá y la actual Administración acabará aceptando la derrota electoral. “No hay necesidad de emprender acciones judiciales porque no hay evidencias del supuesto fraude denunciado por Trump, que será presidente hasta el 20 de enero. Los republicanos que se niegan a aceptar mi victoria están intimidados por él”, consideró.
Aunque el triunfo de Biden todavía no fue oficializado, los principales medios norteamericanos y las consultoras más prestigiosas, como Edison Research, ya le asignaron más de los 270 votos electorales necesarios para acceder a la Casa Blanca. Es tradición que los candidatos den por correctas estas proyecciones, por lo que el demócrata ya fue reconocido como presidente electo por la mayoría de los países democráticos y los republicanos más moderados. En consecuencia, Biden ya se prepara para las presiones que enfrentará el próximo año.
Aparte del manejo de la pandemia de covid, deberá decidir hacia qué dirección orienta la economía. Entre las consideraciones que deberá sopesar se encuentran los llamados de los demócratas más progresistas para que haga un cambio amplio en la Reserva Federal (Fed), dado que la plataforma del partido incluía una regulación financiera más estricta y reformas para que el banco central esté atento a la desigualdad.
En todo caso, este primer punto no afecta solo a Biden sino también al presidente de la Fed, Jerome Powell, un republicano moderado que quizá debería obtener el apoyo de los demócratas si quisiera la reelección. En enero habrá elecciones de desempate en Georgia para determinar qué partido controla el Senado.
Salud a bajo costo
Por otra parte, el futuro jefe de Estado defenderá la Ley del Cuidado de la Salud a Bajo Precio, conocida como “Obamacare” y sobre la que decidirá la Corte Suprema. Biden opinó ayer sobre el caso y lo definió como el último intento de las ideologías de extrema derecha para tumbar el sistema sanitario.
“El cuidado de la salud es un asunto que ha dividido a los estadounidenses en el pasado, pero la verdad es que hoy estamos más unidos que separados en este tema. Este no tiene que ser un asunto bipartidista, porque es un problema humano y puede afectar a cada familia estadounidense”, expresó.
Entretanto, Trump reaparecerá hoy en público en el cementerio nacional de Arlington, donde conmemorará el Día de los Veteranos. Será su primera comparecencia desde que la prensa anunció que él es el primer presidente en perder la reelección desde 1992. (Europa Press-Reuters)
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