Son más de 60 los muertos en el terremoto en Turquía

Son más de 60 los muertos en el terremoto en Turquía

Hay más de 1.000 heridos.

OPERATIVO. Los rescatistas levantan con grúa los autos que quedaron aplastados bajo los escombros de edificios y viviendas, tras el sismo.  OPERATIVO. Los rescatistas levantan con grúa los autos que quedaron aplastados bajo los escombros de edificios y viviendas, tras el sismo.
02 Noviembre 2020

El sismo del viernes por la tarde, con una magnitud de 6,9 según el Instituto Kandilli de Estambul, y con epicentro en el mar Egeo, al nordeste de Samos, causó ya la muerte de más de 60 personas. Rescatistas sacaron ayer a un hombre de 70 años de entre los restos de un edificio en el oeste de Turquía, unas 34 horas después del fuerte terremoto en el mar Egeo, que se sintió también en Grecia, y que dejó más de 900 heridos. El presidente turco Recep Tayyip Erdogan dijo que en Izmir murieron 58 y otras dos en la isla griega de Samos. La posibilidad de encontrar sobrevivientes es cada vez menor, indicó un nuevo balance de la agencia de Gestión de Emergencias y Desastres (AFAD).

En total 896 personas resultaron heridas a causa del sismo que también dejó dos adolescentes muertos en Grecia.

El sismo de magnitud 7, según el Instituto Geofísico de Estados Unidos (USGS), y de magnitud 6,6, según las autoridades turcas, se produjo el viernes por la tarde en el mar Egeo, al suroeste de Esmirna, la tercera mayor ciudad de Turquía, y cerca de la isla griega de Samos.

El ministro turco de Medio Ambiente y Urbanización, Murat Kurum, informó que hay unos 5.000 miembros del personal de búsqueda y rescate para intentar encontrar nuevos sobrevivientes bajo los escombros de las decenas de edificios colapsados parcial o totalmente en Esmirna. En Bayrakli, la ciudad turca más golpeada, los equipos de rescate seguían buscando posibles sobrevivientes entre los escombros de ocho edificios derrumbados, indicó la AFAD . Según un socorrista, al menos 10 personas podrían estar bloqueadas bajo los escombros. Muchos habitantes de la ciudad pasaron una segunda noche en tiendas de campaña instaladas en las calles por miedo a las réplicas. (Télam)

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