Gastronómicos piden al COE trabajar sin restricciones inmediatamente

La Cámara de Actividades Gastronómicas de la provincia volvió a insistir en que el sector está siendo muy castigado y exigió al Comité Operativo de Emergencia (COE) de la provincia la inmediata eliminación de las restricciones de trabajo.

"Horario sin limitaciones, atención dentro de los salones con el correspondiente distanciamiento social entre mesas y la habilitación de la atención dentro de las galerías y en patios internos. Esto incluye a bares, restaurantes y sandwicherías", expresaron en un nuevo comunicado.

Según mencionan en su texto, las "restricciones actuales son inviables económicamente" para el sector. Pidieron también: 

- Habilitar la atención en mesas de cinco comensales, sin límite para familiares convivientes
- Mantener el permiso de utilización de espacios públicos con mesas hasta tanto se pueda habilitar la atención al 100%
- Medidas económicas urgentes: la alícuota cero en los impuestos (Ingresos Brutos, Salud Pública y Sellos retroactivo a la fecha de inicio de la cuarentena obligatoria y por los próximos dos años) e incluir los intereses aplicados en tarifas de servicios públicos, recaudaciones bancarias, percepciones y retenciones de terceros.
- Eliminación del pago de la tasa del IPLA por cinco años
- Otorgamiento de créditos blandos por las instituciones financieras públicas con un año de gracia en el pago
- Tarifa excepcional aplicable a servicios públicos para el sector y refinanciación extraordinaria a tasa cero
- El cumplimiento del decreto presidencial que impide el corte de servicios públicos notificando a las empresas de prestadores
- Otorgamiento de subsidios a la actividad para evitar el cierre de pymes y pérdida de empleos

La Cámara de Actividades Gastronómicas fundamentó sus pedidos en la gravísima crisis que azota al sector y alerta sobre posibles despidos al personal de los locales por el cierre de muchos de ellos "provocado por la actual pandemia y por la falta de apoyo de las autoridades provinciales, y no por la inconducta del empleador".

"Es real la difícil situación sanitaria, pero también es real la necesidad de generar recursos para la subsistencia de emprendedores, trabajadores y sus familias. Si sólo se contemplara el factor sanitario, no estaría funcionando ninguna otra actividad económica, pero no es así", precisaron.