La fría pasión de un soñador despierto

La fría pasión de un soñador despierto

Antonio Seguí expone en París en la lenta reapertura al público de museos y galerías.

Antonio Seguí. Antonio Seguí. LA VOZ
23 Septiembre 2020

En tiempos donde todo es virtual, en Europa se recuperan las inauguraciones presenciales de muestras de artistas consagrados y lentamente en la Argentina comienzan a reabrirse las galerías privadas.

En París, el cordobés Antonio Seguí expone hasta octubre pinturas y esculturas, en la galería Anis Gras de Arcueil. Sus obras están protagonizadas por sus emblemáticos personajes con sombrero que se pasean por ciudades indefinidas, tan anónimas como universales.

Sus trabajos están centrados, en su mayoría, en la figura del hombre, una imaginería que se inspira -además de sus recuerdos de infancia- en escenas de la calle, encuentros fortuitos, un paseo por un mercado o situaciones cotidianas. “Seguí cuida de todas las multitudes que se esconden en su interior y las saca a la luz con la fría pasión de un soñador despierto -señala el texto que acompaña la muestra, escrito por Jacques Meunier-. Sin respetar el uso de las proporciones ni las leyes de la perspectiva, estas asociaciones forman poemas primitivos cuyo propósito no es mostrar la realidad o contar historias, sino explorar los propios límites”.

El artista de 86 años ha realizado a lo largo de su carrera litografías, fotograbados, aguafuertes, aguatintas, serigrafías, carbolitografías, linograbados y carborundums, que le valieron unos 40 premios internacionales, expuso en los principales museos e integran 90 colecciones del mundo. Nació el 11 de enero de 1934 en Villa Allende y está radicado en Francia desde 1963, donde ha sido nombrado Caballero de la Orden de las Artes y las Letras por el gobierno, y es miembro de la Academia Europea de Ciencias, Artes y Letras de Francia.

Tamaño texto
Comentarios
Comentarios