
Jacob Blake.

Jacob Blake, el hombre negro que recibió disparos en la espalda por parte de un oficial de policía blanco en Wisconsin el mes pasado, habló por primera vez desde su cama de hospital, en momentos en que las protestas por la justicia racial continuaban sacudiendo las ciudades estadounidenses. En un video publicado en Twitter, Blake, aún en el hospital, describió su constante dolor tras quedar paralizado de la cintura para abajo. “Tengo grapas en la espalda, grapas en mi maldito estómago”, aseguró en el video publicado por su abogado, Ben Crump. “Duele respirar, duele dormir, duele moverse de un lado a otro, duele comer”.
El ataque a tiros, el 23 de agosto, contra Blake, de 29 años, reavivó las protestas por el racismo y la brutalidad policial que han azotado a Estados Unidos desde mayo, cuando George Floyd murió después de que un policía de Mineápolis se arrodilló sobre su cuello durante casi nueve minutos. Las manifestaciones coinciden con la agitación por las consecuencias sociales y económicas de la pandemia de coronavirus. (Reuters)







