60° Septiembre Musical: la receta de Paté de Fuá que es infalible

60° Septiembre Musical: la receta de Paté de Fuá que es infalible

La banda mexicana que lidera el argentino Yayo González propone la fusión más allá de las tendencias. Casi 15 años en los escenarios.

UNA BANDA DISTINTA. Yayo González, al frente de algunos de sus colegas, de diversas nacionalidades. UNA BANDA DISTINTA. Yayo González, al frente de algunos de sus colegas, de diversas nacionalidades.

Desde Ciudad de México se abre el Escenario Internacional del Septiembre Musical, y la responsabilidad es de Paté de Fuá. Yayo González, uno de sus fundadores, enumera algunas características de la banda que lidera y que se podrá conocer hoy, desde las 19.30, por Canal 10 y por las redes sociales del Ente Cultural. La propuesta es:

1- “Una banda de música atemporal, que no está en ninguna corriente actual”.

2- “Una banda de música inmigrante, porque fusiona géneros que tienen que ver con la herencia de abuelos españoles, italianos, judíos y de todas las culturas de la inmigración en Argentina”.

3- “Una banda que toca música de cantina, de puertos, de estaciones de trenes y de viajeros”.

4- “Y una banda que fusiona géneros como el dixieland, el jazz tradicional, el tango, el pasodoble y la mussette, entre otros”.

Paté de Fuá reúne, entre otras, estas consignas desde 2005, cuando empezó a tocar en México, integrada por los argentinos González (guitarra, voz y composición) y Guillermo Perata (corneta, banjo, composición y arreglos); los mexicanos Luri Molina en contrabajo y Roberto Verastegui en piano; Diego Franco en saxo tenor y Jorge Servín en batería; Dan Mazor, de Israel, en saxo barítono, y Joe Dettiene, de EEUU, en trompeta. Es un grupo grande, con siete músicos en escena, que a veces llegan a ser nueve y se agregan sesionistas.

De ese combo de inmigrantes, a la vez descendientes de inmigrantes, surgió esta propuesta que en abril cumplirá 15 años.

González explica el origen del nombre: “desde los inicios fuimos una banda que rescataba géneros en desuso. Éramos como los cartoneros de la música. Buscábamos lo que la comunidad artística descartaba y todas las tendencias a ver qué nos podía servir a nosotros para aportar a nuestro estilo. Pusimos el nombre casi sin pensarlo y resulta simpático”.

- Es un paté muy bien elaborado, con una trayectoria de varios discos editados, festivales y giras.

- Mucho más que lo que hubiéramos soñado. Hemos hecho shows en el Kennedy Center de Washington DC; hemos girado por el mundo, por la India y por Europa varias veces. Hemos hecho colaboraciones con Armando Manzanero, Lila Downs, Lucía Galán, de Pimpinela, y con Natalia Lafourcade, entre otros artistas. Paté es una banda que tiene muchos fans, sobre todo en México y en Colombia. Encuentran un estilo distinto -y estamos muy agradecidos-. Este iba a ser un gran año para nosotros: íbamos a visitarlos en Tucumán y teníamos fecha en el Museo de Arte Contemporáneo en Los Ángeles.

- ¿En todo ese recorrido siguen fieles a la propuesta musical del comienzo?

- Sí y no, porque después de 15 años y de siete discos -estamos por sacar el octavo- el estilo fue mutando. Pero en el fundamento siguen estando la originalidad y el discurso musical y letrístico propio. Pero también hay una evolución en el sonido y nos hemos vuelto más mainstream. Partimos con un primer disco que grabamos en una habitación con un solo micrófono. Luego el éxito nos tomó por sorpresa entre el público joven. Participamos en todo tipo de festivales. Es evidente que desde hace unos años el público escucha música con menos prejuicios, sin importar el género, porque se centran en si los moviliza o los toca. Eso, a mí como músico popular, me devolvió la fe y la esperanza.

- ¿Cómo invitás a los tucumanos para hoy?

- Los invitamos a escucharnos porque somos una banda súperinteresante. Y en realidad tienen que escuchar todo el Septiembre Musical porque es uno de los festivales más arraigados en Argentina. Los festivales son realmente necesarios: allí uno interactúa con su comunidad, se sensibiliza y se emociona. Y más en estas circunstancias.

González asume la voz de sus colegas: “nos morimos de ganas de ir a Tucumán. Seguramente en 2021 estaremos ahí. Hoy en día hay que aprovechar este pulmoncito que nos da la tecnología, de poder vivir de una manera diferente el espíritu del Septiembre Musical”.

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