Un barrio separado con vallas y unido con solidaridad

Un barrio separado con vallas y unido con solidaridad

En Concepción organizan actividades benéficas para que los chicos del área cerrada del barrio Municipal no se pierdan el Día del Niño.

EN CAMPAÑA. Las vecinas colectan juguetes para regalar mañana. la gaceta / foto de Osvaldo Ripoll EN CAMPAÑA. Las vecinas colectan juguetes para regalar mañana. la gaceta / foto de Osvaldo Ripoll

La solidaridad urgente alivia el peso del bloqueo que, con el paso de los días, agita la angustia de los vecinos. Nadie puede salir ni entrar. Esa suspensión de la libertad, aunque necesaria, duele. Y se refleja no sólo en el rostro de los que están ahí, tras el vallado, sino también en quienes del otro lado extrañan a sus parientes.

Ayer se cumplieron siete días desde que el Comité de Emergencia de la provincia (COE) resolvió vallar cuatro manzanas del barrio Municipal de Concepción al confirmarse ahí cinco casos de covid-19. La medida se tomó por 14 días, con el fin de evitar la propagación del virus.

“Fuerza barrio Municipal”, “Todo va a salir bien”, “Cada día es un día menos” son algunos de los afiches que desplegaron vecinos, amigos y familiares de los aislados con el fin de brindarles aliento. Los carteles están colgados en la valla ubicada en la esquina de Almafuerte y Juramento.

Se trata de la primera muestra de los muchos gestos solidarios que abrazan a las 150 familias de la zona bloqueada. Están además quienes, incesantemente, acercan alimentos y numerosos elementos destinados a paliar diferentes necesidades. Y no faltan quienes, frente a la proximidad del Día del Niño, organizan distintos tipos de actividades benéficas en el afán de reunir juguetes, golosinas, leche, facturas y chocolates para distribuir a los cientos de chicos que pasarán el domingo dentro del vallado.

Alejandro Arévalo es churrero del barrio Municipal y pese a sus limitaciones económicas prevé organizar un chocolate que mañana entregará en botella a los pequeños. Lo acompañará con facturas y golosinas, adelantó.

“Todos los años solía hacer una fiesta por aquí, pero ahora no se puede por esta situación sanitaria que se vive. Igual, estoy apelando a la generosidad de la gente a fin de que me colabore para llegar a los niños con el chocolate que siempre esperan”, relató. “Les entregaré en botella para que lo puedan disfrutar en sus casas” recalcó.

Las estilistas Fernanda Pallares y Lucía Paz, que tienen una peluquería cerca del sector aislado, apelaron a una atractiva propuesta a fin de reunir juguetes para las criaturas: lanzaron el “Show keratina”. “Se trata de un tratamiento capilar que realizamos a cambio de un juguete” explicó Fernanda. “Afortunadamente –dijo- la convocatoria está dando buenos resultados. Y hay que destacar que muchos trajeron regalos pero desinteresadamente. No se quisieron hacer el tratamiento” . La esteticista observó: “son momentos difíciles y hay que estar al lado de quienes nos necesitan. Debemos acompañar a esta gente porque lo que está viviendo también nos puede tocar a nosotros. Nadie lo sabe”.

Valeria Arévalo, también del sector no bloqueado del barrio Municipal, manifestó que durante el Día del Niño extrañará inmensamente su vecindad porque desde hace años realizaba una chocolateada para los chicos. “Era una fiesta linda que duraba hasta tarde” contó. “Ahora al chocolate lo vamos a hacer y lo distribuiremos en botellas a los pequeños que no pueden salir por el vallado”, adelantó.


Tristeza

En el acceso al sector vallado que está en Almafuerte y Juramento, doña Sandra Gramajo permanece sentada en una silla de madera. Se encuentra a la espera de que su hija Daiana se aproxime al puesto y retire los alimentos que le llevó. La mujer suspira con una angustia infinita. Confiesa que extraña inmensamente a su nieto Joaquín, quien se halla aislado con su mamá. “El chiquito me acompañaba de noche. Ahora estoy sola y ni siquiera lo puedo ver. Aunque sé que es por el bien de ellos, esto me duele mucho” confesó. “Este Día del Niño lo voy a extrañar mucho más a mi nietito”, se entristeció.

Adrián David Martínez es mecánico, padre de siete niños y vive dentro del sector vallado. “A los chicos ya les expliqué que vivimos una situación especial y este domingo no les podré regalar nada. Ni podrán ir a una chocolateada. Todo lo que hagamos se disfrutará en casa”, puntualizó.

Alejandra Alincastro, madre de dos niños, admitió que la de mañana será una jornada triste para los chicos que están dentro del vallado. “Nadie podrá juntarse, jugar ni participar de una fiesta en la calle, como antes”, lamentó.


Marcha atrás

El intendente Roberto Sánchez aclaró que no es él quien prohíbe las “chocolateadas” y otras celebraciones por el Día del Niño, sino el Comité de Emergencia de la provincia (COE).

“Nosotros adherimos a las disposiciones sanitarias que se emiten desde ese organismo en razón de la crisis sanitaria que se vive”, insistió. Aunque en un principio Sánchez había anticipado que posiblemente autorizaría a los comercios a atender el domingo, todo parece indicar que hoy daría marcha atrás con esa decisión.

Comentarios