Por Guillermo Monti
31 Mayo 2020
LO MEJOR DE LA SERIE. La actuación de Brooklynn Prince, como la astuta Hilde Lisko, se roba todas las miradas.
Serie / Por Apple TV+
Buena
A la Hilde Lisko no le hablen del Disney Channel. Podrá tener 9 años, pero su película de cabecera es “Todos los hombres del presidente”, al punto de que sabe los diálogos de memoria. Y no es que quiera ser como Woodward y Bernstein; en realidad ya se siente como ellos. El periodismo, heredado de su papá, le corre por las venas. Por eso, la muerte de una vecina le genera las sospechas suficientes para considerar que se produjo un crimen. Así lo publica en un blog que hará muchísimo ruido.
Hasta aquí la serie no escapa del paraguas posadolescente, salpicada por la sombra de “Veronica Mars” y disparada por un planteo tan inocente como carente de originalidad. Y sí, “Home before dark” es de lo más naif. Pero varios elementos juegan a favor. El primero, sorprendente, es que está basada en un caso real. Hilde Lysiak denunció un asesinato antes de que la prensa y la Policía abordaran desde esa perspectiva el caso y con 10 años se convirtió en la integrante más joven de la Sociedad de Periodistas Profesionales de EEUU.
A Hilde la interpreta Brooklynn Prince y su trabajo es tan extraordinario como el que le vimos en “The Florida Project”. Ella es perspicaz, resuelta, valiente y muy inteligente, pero no deja de ser una niña, y esa puerta que la serie le abre a la aventura, con la participación de otros chicos de lo más particulares, la emparenta con la nostalgia ochentosa: “Los Goonies”, “Stranger Things”, “Súper 8” y todos los etcéteras del caso.
“Home before dark” funciona de lo más bien, alejada del punto de vista adulto y en divertida clave detectivesca. Otra buena razón para subirse al excelente catálogo de la plataforma Apple TV+.
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