05 Abril 2020
Hondo pesar provocó el reciente fallecimiento del ingeniero César Edmundo Acuña, respetada figura del ámbito profesional y activo protagonista en el desarrollo de obras de infraestructura que beneficiaron a Tucumán. Hijo del ingeniero Lídoro César Acuña y de doña Amelia del Castillo, heredó de sus padres el amor por el trabajo, por la responsabilidad y por el esfuerzo, virtudes que lo hicieron acreedor de numerosos reconocimientos.
Al igual que su padre, la mayor parte de su labor la desarrolló en Agua y Energía Eléctrica, empresa en la que ejerció con su título de ingeniero mecánico en épocas en que el Estado nacional se encargaba de construir grandes represas para la provisión de energía eléctrica y tender líneas de alta y baja tensión. En este sentido, fue encargado de supervisar e inspeccionar obras de vital importancia para la provincia y para el resto del NOA.
Su extensa vida profesional se nutrió con distintos cargos e iniciativas. Amplió su formación y se recibió de ingeniero laboral; participó en el Consejo Profesional de la Ingeniería de Tucumán; y regresó a la gestión pública para servir como subdirector de Defensa Civil de la Provincia. Posteriormente actuó en el sector privado, en Transener, donde se jubiló. Fundó además el Estudio Acuña, destinado a realizar trabajos como consultor independiente de empresas.
Su familia se prolonga en seis hijos varones y una vasta descendencia, que recordará con orgullo y admiración a quien se destacó por lo estudioso, observador analítico y minucioso, conversador informado y adelantado a su época, buen amigo, solidario aún con riesgo de su vida y muy acertado en sus juicios.
Lo más popular
