Un fusilamiento militar que alteró nuestro país

Un fusilamiento militar que alteró nuestro país

El cabo Paz murió en enero de 1935 tras ser acusado por un Consejo de Guerra. Prostestas.

EN LA GACETA. Una multitud se reunió frente a nuestras puertas a la espera que sea conmutada la pena contra el cabo. Estricto control policial.  EN LA GACETA. Una multitud se reunió frente a nuestras puertas a la espera que sea conmutada la pena contra el cabo. Estricto control policial.

La historia nos remonta a los primeros días de 1935. El lugar: la vecina provincia de Santiago del Estero. En esta ciudad ocurrió un hecho que la conmovió tanto como a Tucumán y al país. El hecho en cuestión fue el fusilamiento del cabo del Ejército Luis Leónidas Paz, pena que le impuso un Consejo de Guerra porque Paz mató a su superior, el mayor Carlos Sabella. La condena a muerte generó protestas en todo el país y en especial en Santiago del Estero, donde el día de la ejecución el comercio cerró sus puertas. Nuestra ciudad tampoco estuvo tranquila y en especial las puertas de nuestro diario que fueron la caja de resonancia ante la posibilidad de tumultos se reforzaron las guardias policiales.

Según relato de nuestro diario, los tucumanos (al igual que el resto de los argentinos) esperaban que el presidente indultara Paz. “A las 13 aún no había noticias, la ansiedad continuaba, pues se vencía la hora señalada para el fusilamiento. Poco después de las 14 se anunciaba, sin confirmación primero y oficialmente luego, la ejecución del cabo Paz, arrancando la noticia un clamor en el que hubo dolor, lamento y protestas generales”.

La crónica agregaba que tras conocerse el fusilamiento, la multitud dejó el frente del diario y “se encaminó insensiblemente hacia la plaza Independencia, los diversos grupos formados se juntaron, levantando una improvisada tribuna delante de la estatua de la Libertad”. Los oradores expresaron su “amarga queja” y protestaron por no haber sido escuchados “los pedidos de clemencia de diferentes personalidades e instituciones”. Los manifestantes luego siguieron por “Las Heras (hoy San Martín) hasta Junín para luego doblar por Mendoza”. En esa esquina efectivos del Escuadrón de Seguridad de la Policía pidieron que se disuelvan, cosa que no fue aceptada. Una carga policial disolvió a la marcha y hubo algunos contusos pero ningún detenido. Las horas de tensión vividas llevaron a todas las tropas de seguridad a mantenerse acuarteladas.

10 DE ENERO DE 1935. La foto principal de nuestra tapa correspondía a la ejecución del conscripto en los cuarteles de la Recoleta 30 años antes. 10 DE ENERO DE 1935. La foto principal de nuestra tapa correspondía a la ejecución del conscripto en los cuarteles de la Recoleta 30 años antes.

Paz tenía 28 años. Era santiagueño, aunque su familia era de origen catamarqueño, y muy popular entre la gente por su actuación como jugador de fútbol en el Atlético Santiago.

El arresto que le imponía Sabella dañaba su carrera. Lo iba a postergar en el ascenso, y justo cuando tenía pensado casarse con su novia, Zoila Ledesma. Con tres intentos de solicitar la revisión de la sanción ignorados con aspereza por Sabella; Paz se desconsoló y descargó seis tiros en el cuerpo de Sabella; fue detenido y se constituyó un Consejo de Guerra especial que lo condenó a muerte. El grupo acababa de volver de Tartagal donde estaba apostado en previsión de la posible escalada de violencia por la guerra entre Bolivia y Paraguay.

La apelación ante el Consejo Supremo de Guerra y Marina tuvo un resultado adverso y se confirmó la sentencia para el 6 de enero. El anuncio de la terrible condena indignó a la población santiagueña. El pueblo se solidarizaba con Paz. Les despertaba simpatía por santiagueño, por deportista y por buena persona. Cuando administraba el rancho, se las arreglaba para repartir el sobrante de comida entre la gente que se acercaba al cuartel.

La orden se cumplió a las 14.05 del 9 de enero de 1935. Nuestro cronista destacaba que tras 30 años se producía otro fusilamiento. En 1905 había sido fusilado un conscripto en el cuartel de la Recoleta.

Nuestro diario realizó una cobertura importante con enviados especiales y corresponsal. “Desde temprano se notaba, en varios barrios de la capital, un visible estado de nerviosidad, de verdadera impaciencia”, decía y agregaba: “un público numeroso se agolpó desde temprano, en los alrededores de los cuarteles”.

Donde la “pena y el dolor más profundo se sentían era en el barrio ‘El Triángulo’, donde nació y creció Paz, muchas de cuyas familias allí residentes permanecieron en vela llorando y rezando las mujeres, mientras los hombres seguían alentando aún la esperanza de que el presidente de la nación conmutara la pena”.

CABO LUIS PAZ. El militar tenía 28 años cuando fue fusilado. CABO LUIS PAZ. El militar tenía 28 años cuando fue fusilado.

El comercio santiagueño cerró sus puertas desde la tarde del 8 de enero en adhesión “a las protestas del pueblo”. Además adhirieron a las protestas los gremios que paralizaron todas las actividades provinciales. Los que estaban a las puertas del cuartel intentaron atacarlo pero fueron controlados. La jornada fue tremendamente agitada con enfrentamientos, pedreas y golpes.

Un momento clave, previo al fusilamiento, fue el bautismo de su sobrina. “A las 11 concurrieron al cuartel del Regimiento 18 de Infantería la hermana del cabo Paz, Francisca Paz del Fernández, acompañada de la novia de éste, Zoila Ledesma. La hermana de Paz llevaba en brazos a su hijita Selva Argentina, de ocho días de edad, a fin de que fuera bautizada en el local del regimiento”. El cabo “sirvió de padrino a su sobrina, a quien el capellán del ejercito Amancio González Paz dio los óleos bautismales”.

El condenado escribió tres cartas las cuales fueron recibidas por nuestro diario que las publicó en exclusiva. Una iba dirigida a sus camaradas donde expresaba “Viva la patria. Adiós camaradas”. Otra para el pueblo en la que agradecía “todo lo que han hecho por mí”. Y la tercera a su hermana: “vos sabés cuanto te he querido y quiero hasta el último momento de mi vida” y “cuídate mucho y preocúpate de tu salud para que vivas muchos años”.

Tamaño texto
Comentarios
Comentarios