06 Octubre 2019
LA FRONTERA EN LAS DOS ALEMANIAS. El “Muro de Protección Antifascist” se construyó en 1961, 12 años después de que se estableciera la RDA.
BERLÍN.- Pasado mañana se cumplirán 70 años del 7 de octubre de 1949, el día en que la Cámara Popular alemana, parlamento sometido a la ex Unión Soviética, creó la República Democrática Alemana (RDA), el Estado del bloque del Este desaparecido hace casi tres décadas a causa de la reunificación con la occidental República Federal Alemana (RFA), que había sido fundada poco antes, el 23 de mayo del 49. Sin embargo, ni el paso del tiempo ni la excelente actualidad político-económica de la Alemania unificada, hoy el país más poderoso de la Unión Europea, han conseguido equiparar la situación social de quienes vivieron del lado oriental del Muro de Berlín con la de los ciudadanos occidentales.
Tras la derrota de Adolf Hitler y la Alemania nazi en la Segunda Guerra Mundial, en 1949 la Cámara Popular adoptó una constitución, convirtió la zona este de Berlín en capital del país y designó al líder comunista Wilhelm Pieck como primer presidente, aunque el rumbo del país ya había sido decidido tres años antes, cuando la ocupación soviética dispuso un sistema unipartidista y, en consecuencia, determinó la unión de los partidos Socialdemócrata (SPD, por sus siglas en alemán) y Comunista (KPD) y creó el Partido Socialista Unificado (SED).
En los primeros años de la RDA, el Gobierno satélite de la Unión Soviética implementó la reforma agraria y expropió las propiedades de los terratenientes. Entretanto, mientras convivían bajo la consigna “Nunca más fascismo, nunca más guerra”, los alemanes de la RDA empezaron a pagarle enorme reparaciones de guerra a las autoridades soviéticas. El 14 de mayo de 1955 la Alemania oriental firmó el Pacto de Varsovia y se sometió a la política militar de la Unión Soviética.
El Gran Hermano
En un territorio de 108.000 kilómetros cuadrados, durante 40 años los alemanes del Este vivieron aislados de Occidente por el Estado totalitario que inspiró el Gran Hermano de la novela de George Orwell “1984”. Mientras la RFA, con capital en Bonn, desarrollaba una democracia liberal y una economía capitalista, en la Alemania socialista permanecían los flujos de refugiados, las ciudades destruidas y la falta de bienes básicos propios de la segunda posguerra.
Sin embargo, la división de Alemania recién se selló el 13 de agosto de 1961 cuando las autoridades comunistas comenzaron a levantar el Muro de Berlín, reforzaron las instalaciones fronterizas y silenciaron cualquier tipo de crítica contra el Gobierno. La onmipresente Stasi, o policía secreta, sostendría el poder del Estado totalitario durante 28 años.
EL FINAL. Gorvachov saluda a Honecker, días antes de la caída del muro.
El aniversario número 40
El 7 de octubre de 1989, el día del cumpleaños número 40 de la RDA, la Administración comunista celebró el aniversario con un gran programa festivo.
Ese día el entonces secretario general del SED, Erich Honecker, reapareció en público tras una larga enfermedad. Entre sus invitados estaba el jefe de Estado soviético, Mijail Gorbachov.
Aunque Honecker había dispuesto que la Stasi evitara cualquier protesta, durante la cena llegaron hasta el palacio gubernamental cánticos disidentes que imploraban: “¡Gorbi, ayudanos!”. El grupo de manifestantes no consiguió atravesar el cordón policial.
Sin embargo, los opositores recopilaron en las semanas siguientes informaciones sobre los arrestos y ataques violentos y las difundieron de diferentes maneras en la prensa occidental.
La caída del Muro
El 18 de octubre de 1989 Honecker renunció a la Secretaría General del Partido Socialista Unificado, aduciendo problemas de salud. Menos de un mes después, el 9 de noviembre de 1989, la caída del Muro berlinés decidió el destino del Estado comunista.
Menos de un año después, el 3 de octubre de 1990, la RDA se adhirió a la RFA y adoptó el nombe de esta última. (Télam)
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