Cartas de lectores
30 Septiembre 2019

EL ACCESO NORTE

Al inicio de los años ‘60, recuerdo que comenzó la obra del cruce de las Avenidas (entonces) Salta y Las Bases, obra que solucionaría, en ese entonces, el tránsito intenso que ya se había generado en el ingreso Norte a San Miguel de Tucumán. Según los comentarios que corrían, se estaba construyendo un acceso moderno, con forma de “trébol de cuatro hojas”, toda vez que los terrenos expropiados así lo hacían parecer, de manera que en Tucumán íbamos a tener la obra vial más importante del norte del país. Aún recuerdo a la antigua Estación de Servicio YPF que estaba en la esquina suroeste y que fue demolida con ese propósito, el de ganar más terreno. Hoy, a 60 años de aquel avance que lograría nuestra ciudad, tenemos solamente lo que se pudo hacer en esa ocasión, o no se quiso: un sistema al que no se le puede llamar “complejo vial”. Es que no se resolvió prácticamente nada, ni siquiera para el tránsito diario, sea este diurno o nocturno, ya que resulta un gran riesgo pasar desde una avenida a la otra por la inseguridad que representa, debido a los asaltos, a su arbolado, a sus pastizales y a la cantidad de basura. Hay que ser muy audaz para pasar de una a otra avenida. Quiero creer que todavía estamos a tiempo, es cuestión de replantear la obra y tener la voluntad (y el dinero necesario), para construir algo que favorezca a Tucumán. Puedo decir que sería una obra muy importante para el desarrollo de nuestra capital.

Enrique Julio Ortega


INTERIOR ESTANCADO

El fin de semana pasado decidí recorrer algo de nuestra zona este. Lamentablemente no fue una buena idea, pues me encontré con un cuadro aterrador, triste y lamentable. Digo esto pues al ingresar por la ciudad de Alderetes, precisamente por avenida Rivadavia, fue encontrarme con una roña espantosa. Dicha arteria mostraba su peor cara: suciedad a ambos lados, pero no producida durante un fin de semana, sino de días. En la plaza, los montículos de basura estaban diseminados, y ni hablar de las pérdidas de agua. Y siguiendo por la ruta N° 304, llegando a La Ramada, encontré una rotonda con un mástil, cuyo pabellón nacional luce deteriorado por el paso del tiempo. Siguiendo con nuestro deseo de conocer el interior tucumano, regresamos y tomamos la ruta N° 306, hacia la zona de Los Bulacio. Otro cuadro aterrador: una ruta sin señalización, deteriorada en su cinta asfáltica. En el cruce con la ruta N° 321, una rotonda que refleja la falta de capacidad y de ideas de quienes nos gobiernan. Dicho lugar luce triste, vacío, sin vida, lo que me lleva a preguntar qué opinarán los turistas que por allí pasan, o más bien, cómo es posible que al delegado comunal no se le ocurra una idea para embellecer el lugar. Es decir, colocar flores y macetones, quizás un mástil. Conversando con vecinos del lugar, se mostraron entusiasmados con la idea de jerarquizar la rotonda, a tal punto que uno de ellos donaría una rastra cañera para adornar el lugar. Ni hablar de los postes de luz deteriorados, en pésimo estado y a punto de caerse, con el riesgo que esto acarrea. Espero que estas líneas sirvan para despertar conciencia en quienes nos gobiernan, para que comiencen a trabajar activamente por su gente. Basta de contentarse con tener los sueldos al día. ¡Trabajen por sus ciudades!

Marcelo Maza

Constitución 1.600


Tafí Viejo

ÁLVARO PÉREZ ACOSTA

Con gran beneplácito leí en LA GACETA que está pronto a publicarse el libro de memorias de Álvaro Pérez Acosta. En una oportunidad, hace unos años, escuché en un programa televisivo de qué modo el joven dictaba sus recuerdos a su padre y este tomaba nota en un pizarrón de su domicilio. Pensé, entonces, que no había mejor manera de dar utilidad a un pequeño fondo residual que conservábamos de las actividades de un grupo de escritores, y al que no se había dado destino desde un año atrás. El importe alcanzaba para la edición de 50 ejemplares de unas 100 páginas. Habiendo hecho la consulta con la editora, hice entrega de la suma a su hermana para la publicación que ahora se concretará. Celebro también el apoyo que en la nota del diario manifestaron sus ex compañeros de colegio y la alegría que el cumplimiento de este deseo significará sin duda para Álvaro.

Norah Scarpa Filsinger

EL HIDROARSENICISMO

En la editorial de LA GACETA del 15/09/2019, se pone en evidencia, una vez más, el problema del hidroarsenicismo, y cabe decir que, previo estudio, proyecto y ejecución, la solución podría estar en la utilización del agua no contaminada de ríos y arroyos. Y en una breve e incompleta enumeración, están el río Urueña, para 7 de Abril y la zona sur; el río Medina, aguas arriba de La Sala, para Alderetes, Banda del Río Salí y Lastenia; el río Loro antes de llegar a El Cadillal, antes de juntarse con el río Salí, para la zona de El Timbó y aledaños; en Trancas, el río Ñorco y otros, antes de unirse y formar el río Vipos; y aguas arroba del proyectado dique Potrero de Las Tablas, en donde se junta el río Grande con el río Anfama, con tomas de agua en ambos ríos, para desde allí, con un acueducto y por gravedad, con el consiguiente ahorro de energía, dar agua a Lules, Yerba Buena y Tucumán. En cuanto al departamento Leales y la zona de La Madrid que padece el hidroarsenicismo, traer por acueductos desde el pie del monte de la Sierra del Aconquija. En cuanto a la toma de muestras de agua para su análisis, conviene hacerlas ahora, antes que comience el período de lluvias, y de paso medir los caudales de ríos y arroyos. Todo esto se puede estudiar, proyectar y llevar a cabo obras con personal de Tucumán, y sus reparticiones del Estado, con un gasto mínimo, con recursos propios, como se hacían este tipo de estudios y proyectos hidráulicos y sanitarios, antes de las privatizaciones por las hoy desaparecidas empresas del Estado como Dipos y Agua y Energía.

Juan Carlos Rosario Medina

Lucas A. Córdoba N° 285


San Miguel de Tucumán

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