Cartas de lectores
23 Agosto 2019

CONSTITUCIONALIDAD

Con satisfacción leí en LA GACETA del 20/8 sobre el planteo de inconstitucionalidad del artículo 68 de la Carta Magna provincial, que asigna al presidente de la Legislatura la potestad de fijar el monto de la dieta que deben percibir los legisladores. La acción fue promovida por los constitucionalistas Luis Iriarte y Carmen Fontán. Esa atribución no tiene límites ni referencia a otras remuneraciones de la escala de la administración pública o de otro poder del Estado. Libertad absoluta para que el vicegobernador, a su solo criterio y evaluación, establezca los montos que sólo él decide que debe percibir cada uno de los 49 legisladores. Puede ser mezquino o extremadamente generoso. Nadie le puede cuestionar nada, en tanto la norma constitucional votada en el 2006 lo establece palmariamente. Claro, vale también decir -transcurridos 13 años de vigencia de una Carta Magna horadada por sentencias judiciales firmes- que esta Constitución es, en sí misma, inconstitucional de origen. Por su origen, precisamente, ya que fue votada por 26 convencionales elegidos como tales y por 14 legisladores que en su tiempo votaron, junto con otros de sus pares, la ley que declara la necesidad y conveniencia de la reforma constitucional. Esos 14 legisladores que aprueban la ley y los mismos 14, ahora en su doble condición de “legisconvencionales”, votan en la Convención Constituyente derivada tal cual votaron como antes en la Legislatura. Nulidad de origen que invalida lo resuelto por la Convención. ¿Por qué? Simplemente porque esos 14 “legisconvencionales” podrían haber impedido, junto con otros, que la Convención pudiera ejercer uno de sus derechos: declarar que no es necesaria ni conveniente la reforma declarada en la ley convocante. Y para esto utilizó un recurso de las matemáticas: el recurso del absurdo (Reductio ad absurdum). Con sólo suponer que en lugar de 14 fueran los 40 legisladores de la Legislatura los elegidos como convencionales (si 14 lo fueron ¿por qué no los 40?) se afirma con absoluta seguridad que la Convención no podía ejercer su facultad de rechazar la declaración de reforma constitucional. Para el cierre cito uno de los asuntos que llama la atención. No fue considerado hasta ahora y lo propongo al conocimiento y debate. El artículo 67 de la endeble y agujereada Constitución (2006) que fija lo que le corresponde hacer al Poder Legislativo, más tiene un tufillo de feudalismo o de monarquías absolutas, como casi todas lo son: “Fijar para la Administración Provincial el Presupuesto de Gastos y Cálculo de Recursos que deberá elaborar y someter anualmente el Poder Ejecutivo, como así también fijará e incorporará a este, su propio presupuesto. Esta incorporación no podrá ser vetada”. Que el presupuesto del Poder legislativo no pueda ser vetado, es simplemente un “piedra libre” para todo. Los gastos sociales ($ 615 millones) y las valijas que tuvo oportunidad de mostrar LA GACETA en fotografías sobre el manejo discrecional y en las sombras, son la muestra de lo mal que se ha redactado y votado una reforma constitucional. Por ello, espero que pronto se instrumenten planteos de “inconstitucionalidad” de la Constitución votada en 2006. Y un botón de muestra de cómo se “miente” a la historia, la que se escribirá en el futuro: siendo que el “preámbulo” también junto con otros artículos de la Constitución de 1990 era motivo de reforma según la ley; cuando se promulga la constitución reformada leemos: “Constitución de la Provincia de Tucumán. Boletín Oficial 07/06/2006, Preámbulo: Nos, los representantes del pueblo de la Provincia de Tucumán, reunidos en Convención Constituyente, por su voluntad y elección, con el objeto de afirmar su autonomía y afianzar el federalismo… sancionamos y ordenamos la presente Constitución”. La verdad es otra. Se reunieron para reformar la constitución de 1990. Ese es el hecho histórico. Dentro de 100 años los historiadores se confundirán creyendo, por lo que está escrito, que Tucumán proclama su “primera constitución”, porque no habla de una reforma anterior. Para prueba de cómo se venía procediendo al respecto, rescato lo que establece el Preámbulo de la Constitución sancionada el 24 de junio de 1907: “Nos, los representantes del pueblo de la Provincia de Tucumán, reunidos en Convención Constituyente, por su voluntad y elección, con el objeto de reformar la Constitución de 1884, promover el bienestar general, garantir el libre ejercicio de sus derechos a todos los habitantes del territorio, invocando a Dios, sancionamos y ordenamos la presente Constitución”.

Carlos Duguech

ELECCIONES DE OCTUBRE

Desde que obtuvieron el mayor porcentaje de votos en las Primarias Abiertas Simultáneas Obligatorias (PASO), los kirchneristas están tan ansiosos que se comen las uñas hasta lastimarse los dedos. Y se babean desvergonzadamente por llegar al poder. Me recuerdan la escena de los dibujos animados, en la que al “lobo feroz” se le hace agua la boca mirando jugar en el bosque a “Los 3 chanchitos”. Cual DT de primera, ya dan indicaciones como si ellos fueran los encargados de armar el equipo. Ya presienten el pitazo final del partido y la lluvia de papelitos. Por esto, les advierto a Alberto Fernández y a Cristina Fernández de Kirchner, y a todos sus prosélitos, que las elecciones todavía no se realizaron. Que, futbolísticamente hablando, lo que sucedió el 11 de agosto se concretó un gol y, tras el VAR, lo anularon. Las PASO no son más que una encuesta para verificar la tendencia del pueblo hacia los respectivos candidatos que se presentarán en las próximas elecciones. Y sirven para hacerle saber al gobierno actual la disconformidad reinante con su accionar. Pero, es sólo un entrenamiento. Todavía falta resolver quién ganará la final. Tras la cual, la verdadera mayoría de los electores dirá qué prefiere.

Daniel E. Chávez

FERNÁNDEZ Y LOS JUECES

Comenzamos mal con las declaraciones del doctor Alberto Fernández, que amenazó a los jueces que investigan a Cristina Fernández de Kirchner: “Van a tener que dar explicaciones”. El principal colaborador de la ex presidenta apuntó contra Ercolini, Bonadio, Irurzun, Hornos, Germignani. Sin haber asumido la presidencia de nuestro país, este hombre, que tiene demasiado por aclarar, después de renunciar al cargo como jefe de Gabinete, había abundado en reclamos, comentarios y apreciaciones, defenestrando a su actual compañera de fórmula, la señora Cristina Fernández. Debería comprender que la historia sí tiene memoria y que sólo con una moral intachable se puede despotricar como lo hizo en distintos momentos y en distintos lugares. Cabe considerar que declaraciones como estas, lejos de amedrentar, son una manera de motivar y optimizar a los que llevan adelante causas y procesos que afectan de manera directa e indirecta, a la señora Cristina. No debemos olvidar que hoy hay jueces capaces, dignos y morales, que enaltecen el hacer de este poder tantas veces manoseado por políticos que pretenden una justicia hecha sólo a su medida, con el agravante de que ningún funcionario que pertenezca, aunque sea potencialmente, debe inmiscuirse, objetar y menos amenazar a los integrantes de un poder, sujeto a la democracia que nos rige. Él, a punto de convertirse en el presidente de nuestro ajetreado y manoseado país, debería ser el primero en reivindicar la independencia de los poderes. Si estas declaraciones son el prolegómeno de lo que fatalmente nos espera, debe asumir que sólo ante la Justicia deben demostrar su inocencia los que son procesados. Prontos a iniciar otro período presidencial, debemos recordar que sin capacidad, sin total transparencia y sin principios morales, es imposible pretender un país que pueda brillar por su justicia social, lanzado hacia una constante superación en lo que hace a todos sus valores. A la patria no se la logra con pasiones inconfesables, tampoco con dobles discursos. Para hacer patria sólo es necesario conocer sobre los grandes hombres de nuestra historia, que hicieron de nuestra patria un ideal de Justicia y Libertad. Para esto entregaron lo mejor de sí, hasta sus propias vidas, y murieron pobres, felices de haber cumplido con sus más caros ideales de patriotismo.

Héctor Leonardo Bravo

COACHING ONTOLÓGICO EN DEBATE

El conflicto comenzó cuando dos legisladores presentaron un proyecto de ley para la creación del Colegio de Coaching Ontológico” (LA GACETA). “Los psicólogos enviaron una nota al vicegobernador, Osvaldo Jaldo, en la que expresaron su rechazo a la creación de una institución para los coaching”. “No hacemos diagnósticos, pronósticos ni tratamientos tendientes a la recuperación, promoción y prevención en cuanto a la salud mental. Los coaches trabajamos principalmente con diseño de futuro, facilitando procesos de aprendizaje. Trabajamos con personas sanas, mentalmente, que quieren un resultado específico y por alguna razón no están pudiendo lograr”, sostienen. ¿La última palabra la tendrán los legisladores? Los psicólogos se encuentran en una situación de desventaja ¿Razones? El gobierno nacional oficializó una resolución (1254/18) que afecta a la Licenciatura en Psicología. Recorta una enorme cantidad de actividades pasibles de ser ejercidas por egresados de carrera de grado. De 16 actividades profesionales exclusivamente reservadas al título, se pasó a cinco. Desaparecen las relativas a las áreas educacional, social comunitaria, jurídica y pericial, laboral y de diseño de políticas públicas de Salud. Las “actividades exclusivas” se limitan al área clínica y orientada a las actividades de diagnóstico, evaluación y administración de técnicas. “Actividades reservadas” no son lo mismo que “incumbencias”. Las primeras derivan a las segundas. Las reservadas son aquellas autorizadas a ejercer solamente por la profesión como actividad (aún trabajando interdisciplinariamente en una misma área con profesionales de otras carreras). Este tema no se pudo implementar por el lado de la Salud. Retorna, ahora, por Educación. El coaching entra en oposición con las incumbencias y perfil del psicólogo establecidos en las leyes de Salud Mental y del Ejercicio Profesional de la Psicología. Hay, en cambio, un tema de fondo. Transformar las carreras de grado en carreras más cortas y flexibles, devaluando títulos de grado. Títulos intermedios o tecnicaturas, como coaching, counselings, etcétera, vienen proliferando, promoviendo un ejército de semiprofesionales y técnicos. Sus servicios abaratan el costo de un profesional con título de grado en las distintas áreas del mercado laboral público y privado, incumbentes a la Licenciatura en Psicología. Este tema, el de la “educación emocional”, tratado prácticamente en todos los cursos docentes, convertido en una nueva “panacea”. Va a afectar, a la larga, a otras carreras de grado. La Legislatura, antes de expedirse, debe escuchar a los profesionales de las psicologías.

Pedro Pablo Verasaluse

CARTA A BOLSONARO

Inestimable Jair: Quiero, a través de LA GACETA de Tucumán, hacer público mi deseo de “devolverle” sus reiteradas declaraciones sobre el proceso electoral argentino, así como sus valoraciones sobre los posibles pensamientos o intenciones de sus candidatos. Creo que no le asiste -a su persona ni a su investidura- ningún derecho a intentar tener injerencia sobre la forma democrática en que los argentinos podamos definir nuestro futuro, o cómo decidamos la selección de aquellos en quienes depositaremos temporalmente la responsabilidad de administrarlo. Vivo en Tucumán (territorialmente la más pequeña de las provincias argentinas), dueña de un paisaje bello y exuberante como tantos lugares de Brasil. Hace muchas décadas, gran parte de nuestra geografía estaba cubierta por inmensas plantaciones de caña de azúcar. Fueron tiempos de esperanza, desarrollo y también de olvido e injusticias después. Las historias de esas épocas, narran la existencia de un personaje siniestro, un ser recordado por la crueldad e insensibilidad con que ejercía su poder: El Kapanga. Lo que no recuerdo es si, en esos relatos, estos personajes, además de maltratar a los suyos, también opinaban sobre la vida y lo que ocurría en campos vecinos. Disculpe alguna inconsciente (o tal vez exagerada) asociación. No quiero despedirme sin expresar mi más profunda admiración por la enorme hospitalidad de los brasileños en cada ocasión en que pude recorrer esa bendita tierra. También mi emocionada admiración por la música de ese pueblo, seguro reflejo de la belleza interior de su gente. Lo saludo respetuosamente en la esperanza de cumplir mi deseo.

Gabriel Fulgado

Comentarios