"Nuestros besos no son delito": en Tucumán marcharán en contra del lesbo-odio

"Nuestros besos no son delito": en Tucumán marcharán en contra del lesbo-odio

Mañana se realizará una jornada de visibilización y protesta, tras un fallo por resistencia a la autoridad.

CONDENADA. Mariana Gómez recibió la condena de la justicia. CONDENADA. Mariana Gómez recibió la condena de la justicia. FOTO LA FM
04 Julio 2019

Organizaciones sociales, de derechos humanos e integrantes del colectivo LGBT (Lesbianas, Gays, Transexuales y Bisexuales) se manifestarán mañana en contra del lesbo-odio.

“Nuestros besos no son delito”, será la consigna con la que comenzará la movilización, desde las 9, en la Facultad de Derecho (25 de Mayo y Santiago). Durante toda la jornada se leerán los fundamentos de la causa que movilizó la iniciativa por condenar a un año de prisión en suspenso a Mariana Gómez, la joven que se resistió a las fuerzas policiales que la redujeron por resistencia a la autoridad, luego de fumar y besar a su esposa en una estación de trenes en Buenos Aires.

La jornada fue organizada en repudio al fallo que se dio a conocer el pasado 28 de junio por el delito de “resistencia a la autoridad en concurso con lesiones leves agravadas, por tratarse de miembros de las fuerzas de seguridad pública”. 

"La comunidad LGBTIQ se encuentra en estado de alerta ante estos atropellos jurídicos, ya que la sentencia sienta un peligroso precedente, legitimando a las fuerzas represivas para aplicar la mirada discriminadora históricamente arraigada en la institución policial, con la finalidad de disciplinar y criminalizar a las lesbianas", reza el comunicado oficial por el que se dio a conocer la movilización.

"Que una contravención tan leve llegue a un juicio de tal envergadura, hasta el punto de que la fiscal pida dos años de condena, sólo muestra que el sistema judicial es una herramienta más del patriarcado para aleccionar a los cuerpos disidentes", sigue.

"Una vez más el Poder Judicial y la institución policial cumplieron con su papel tradicional de guardianes de la moralidad y el mantenimiento del status quo del que se vale el Estado para agravar las condiciones de vida de las identidades disidentes persiguiéndonos, hostigándonos y criminalizándonos.  El único desacato de Mariana fue al orden cisheteronormativo", finaliza.

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