Homenaje a dos creadoras irrepetibles

TRIBUTO

• A las 22 en el Centro Cultural Virla (25 de Mayo 265).

Eladia Blázquez y María Elena Walsh compartirán escenario esta noche en el Centro Cultural Virla. Las autoras serán evocadas en sus composiciones para recorrer mundos oníricos, mágicos, desafiantes e inspiradores en las voces de Gisela Canevaro e Isabel Neville y la guitarra y dirección musical de Carlos Podazza. En el homenaje los acompañarán Javier Bolea (teclados), Víctor Juárez (bandoneón), Café Valdez (percusion) y las niñas del taller de canto de Carolina Boscarino en las canciones infantiles.

El paseo por las melodías atravesará baladas, tangos y canciones ampliamente conocidas y algunas de menor circulación, dentro de un repertorio seleccionado especialmente para que haya emoción y calidez entre los artistas y el público, con un aporte a la reflexión en los textos.

“Las dos compositoras marcaron sendos hitos en la escena nacional -destaca Canevaro-. Las une la profundidad de sus letras, la cadencia en el decir y la pasión en el transmitir. Eladia, porteña de pura cepa, se entregó de lleno a diversos géneros: primero fue la canción española, luego la melódica y sudamericana, más tarde transitó por el folclore, y finalmente quedó atrapada por el tango y la balada. María Elena, nacida en Ramos Mejía, fue una escritora precoz, poeta entrañable, cantautora y artífice de libros y canciones infantiles inolvidables. Su personalidad trascendió las fronteras argentinas y su versatilidad la llevó a hundir la daga en el alma de quienes, a lo largo de generaciones, crecieron con sus canciones”.

La cantante elogia particularmente “la riqueza en la composición y la magia de las poesías de ambas, que nos transportan a mundos tan diversos como actuales”. “La armonía atrapa las sensaciones, muestra un recorrido sin escalas por los estadios del alma, deja al descubierto las dudas, los enojos, los amores y también algunos rencores propios del ser humano. Ellas son hijas de una Argentina que amamos, que a veces duele pero que nunca dejó su clamor de libertad y justicia, porque a pesar de todo, como reza la letra de Blázquez, la vida que es dura también es milagro, también aventura”, agrega.