Por Guillermo Monti
24 Noviembre 2018
CRÍTICAS DE CINE
LA CHICA EN LA TELARAÑA | ACCIÓN/SUSPENSO - PM16 - 117’
REGULAR
ORIGEN: EEUU/Gran Bretaña/otros, 2018. DIRECCIÓN: Fede Álvarez. CON: Claire Foy, Sverrir Gudnason, Lakeith Stanfield, Sylvia Hoeks, Stephen Merchant, Christopher Convery, Cameron Britton. GUIÓN: Jay Basu, Fede Álvarez y Steven Knight. FOTOGRAFÍA: Pedro Luque. MÚSICA: Roque Baños.
El tecnothriller, marca de fábrica de la saga Millenium, cede ante la acción pura y dura en “La chica de la telaraña”, lo que no estaría del todo mal si la trama abrevara en fuentes más originales. No es el caso. Lisbeth Salander es menos hacker y más Jason Bourne durante dos horas de peleas y persecuciones carentes de la intriga y de la densidad que en los libros hacen de Salander una figura tan atractiva.
La película aborda la cuarta entrega de la saga, escrita por David Lagercrantz sin el brillo que había caracterizado las tres primeras novelas, obra de Stieg Larsson. Salander y el periodista Mikael Blomkvist (Sverrir Gudnason) se ven envueltos aquí en una conspiración internacional a partir del robo de Firefall, un programa capaz de controlar las armas nucleares en todo el mundo. El caso está cruzado por la propia historia de Lisbeth, cuyas vivencias de la infancia se empeñan en volver.
Claire Foy (actriz de moda desde el éxito de “The Crown”) no da la talla en un papel por el que pasaron Noomi Rapace (magnífica) y Rooney Mara (correcta). A su Lisbeth le sobran dudas y le falta oscuridad. El reparto se mueve en la misma sintonía.
De la adaptación se hizo cargo el uruguayo Fede Álvarez, director de la notable “No respires”. Le salió un híbrido, con el blanquísimo invierno escandinavo como escenario. Recomendable para incondicionales de la acción. No más.
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