Pese al faltazo, el oficialismo capitalino cree que debe formar parte de la conducción

Pese al faltazo, el oficialismo capitalino cree que debe formar parte de la conducción

Los concejales de Cambiemos faltaron ayer a la sesión en la que asumió Armando Cortalezzi

ROMANO NORRI / ARCHIVO ROMANO NORRI / ARCHIVO
21 Noviembre 2018

Los concejales de Cambiemos faltaron ayer a la sesión en la que asumió Armando Cortalezzi su segundo mandato como presidente, porque insistieron en que la elección no fue legítima.

“No vamos a legitimar algo que ha sido con un procedimiento incorrecto”, explicó, para justificar el faltazo, el radical Agustín Romano Norri, presidente de la bancada Cambiemos.

Si bien los opositores al intendente Germán Alfaro (Cambiemos) defienden que legítimamente se reeligió a Cortalezzi como presidente del cuerpo por ocho votos contra seis, los alfaristas insisten en que el comicio estuvo viciado. Romano Norri explicó que, mientras los ediles votaban, hubo un momento en que cayó el quórum (es decir, no había 10 ediles en el recinto), por lo que la votación no fue válida. “El acto administrativo finaliza cuando dicen ‘aprobado o desaprobado’. Por eso no pudieron luego darle las facultades al presidente para que integre las comisiones. La versión taquigráfica es clara: no había quórum”, afirmó convencido el radical.

El vicepresidente primero, Dante Loza, cuestionó las ausencias de los concejales alfaristas y de representantes del municipio: “es lamentable que se privilegien peleas políticas sin sustento sobre la institucionalidad”.

Los concejales de Cambiemos tampoco estuvieron presentes en sus despachos ayer por la tarde, mientras se producía la sesión.

“Que los bussistas defiendan una sesión así significa que son parte del espacio: no se animaron a levantar la mano pero dieron quórum para que asuma Cortalezzi. Quedó demostrado que Alperovich, Manzur y Bussi son lo mismo”, criticó Romano Norri. El radical explicó que aún no definieron si faltarán a futuras sesiones: “”lo tenemos que definir pero creo que debemos participar para no dejarles aprobar lo que quieran. Si los lobos cuidan las gallinas, ¿cómo termina todo?”, ironizó.

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