15 Noviembre 2018
La muerte de Francisco “Pancho” Delgado causo gran dolor entre los pescadores de la provincia, Salta y Jujuy. El multicampeón no solo fue uno de los máximos referentes de este deporte, sino que además tuvo una activa participación como dirigente en los clubes de pesca más importantes de estas tierras.
Ingeniero eléctrico de profesión y docente universitario supo ganarse el respeto de sus pares como uno de los más experimentados. Hombre de pocas palabras, siempre supo ganarse el afecto de los pescadores a los que transfirió sus conocimientos en los últimos años.
Muy pocos saben que sus primeros pasos en la pesca los dio en La Aguadita y siendo estudiante universitario comenzó a descubrir los secretos de El Cadillal. Luego se unió al Club de Caza y Pesca de la Universidad Nacional de Tucumán y posteriormente se mudó al Regatas, donde competía. Este año peleó hasta el final el título del club.
También se hizo famoso por haberse transformado en uno de los grandes pescadores de dorados de El Frontal y de la cuenca del río Salí. Miguel Saguir y Roque Catania, fueron sus hermanos de la vida, como él los llamaba y junto a ellos participó con éxito en competencias regionales y nacionales. No había reunión en la que el trío no contara sus experiencias y anécdotas. Los deportistas más jóvenes lo admiraban y respetaban. Sus palabras eran escuchadas con suma atención porque siempre dejaban alguna enseñanza.
“Pancho” murió de manera sorpresiva a los 58 años. Sus restos están siendo velados en una sala de la empresa Flores. En ese lugar, pescadores tucumanos, salteños y jujeños le están rindiendo tributo al hombre que hace años que se decidió a enseñar los secretos de este deporte a los más jóvenes. Sus “alumnos”, conmovidos, están convencidos que el ingeniero Delgado murió, pero su legado será imborrable.
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