La ONU sesiona en tiempos de diplomacia defensiva

La ONU sesiona en tiempos de diplomacia defensiva

La Asamblea General de las Naciones Unidas se reúne desde el martes en Nueva York y Trump marca la agenda interna y externa.

PODEROSO. Toda la atención estará puesta en el mensaje del líder de EEUU. Reuters PODEROSO. Toda la atención estará puesta en el mensaje del líder de EEUU. Reuters
23 Septiembre 2018

NUEVA YORK.- Donald Trump no es muy fan de las Naciones Unidas, que el martes celebra su Asamblea General en Nueva York. En una ocasión, el presidente de EEUU se refirió a la ONU como “un club en el que la gente se reúne, habla y pasa un buen rato” y cree que sus gastos están “totalmente fuera de control”.

Trump aprovechó el año pasado su estreno en la Asamblea General para hacer publicidad de su rascacielos y amenazar con la aniquilación al líder norcoreano, Kim Jong-un, despertando en todo el mundo el temor a una guerra.

Este año, el conflicto con Corea del Norte seguirá sobrevolando la cita, pero desde un punto de vista muy diferente después de que Trump celebrase una histórica cumbre con Kim, quien se comprometió a “desnuclearizar” su país, aunque está por verse cómo y cuándo lo hace.

Pasado mañana arrancan los discursos de los jefes de Estado y de Gobierno, que se prolongarán hasta el 1 de octubre. El primero en hablar será el presidente de Brasil, Michel Temer. (Ver Brasil siempre da el primer discurso)

Después intervendrá Trump y ese mismo día también subirán al estrado el presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, el iraní Hassan Rohani y la primera ministra británica Theresa May.

Entre los líderes latinoamericanos el martes estará Mauricio Macri, que intentará aprovechar la ocasión para tejer nuevas redes de contención para la crisis de Argentina, y buscará una reunión con Trump. También hablará ese día el mexicano Enrique Peña Nieto, que a fin de año cederá el poder a Andrés Manuel López Obrador.

Entre las caras nuevas, el miércoles estará el colombiano Iván Duque; y el jueves, el español Pedro Sánchez, quien llegó al Gobierno en junio tras una moción de censura que sacó del poder a Mariano Rajoy. También se espera que se estrene al nuevo presidente cubano, Miguel Díaz-Canel, pero su presencia no está confirmada.

No está claro si viajará a Nueva York el presidente venezolano, Nicolás Maduro, cuyo país está en el foco de la atención internacional por la crisis política y económica y el imparable éxodo de venezolanos hacia otros países. Maduro afirmó recientemente que está evaluando las condiciones de seguridad antes de confirmar si viajará a Nueva York. “A mí me tienen en la mira para matarme”, sostuvo.

En cuanto a Nicaragua, sumida en una grave crisis política con casi 500 muertos, el presidente Daniel Ortega expresó su intención de asistir al cónclave de la ONU, pero no es seguro que vaya. En la lista oficial figura como uno de los últimos oradores el día 26.

La “cuestión” de Irán

Trump será el principal protagonista de la cita. Para mañana ha convocado a una cumbre sobre la lucha global contra las drogas; y el miércoles presidirá una reunión del Consejo de Seguridad de la ONU. El plan original era debatir sobre Irán y los peligros que entraña, pero esta semana la propia Casa Blanca lo ha puesto en duda.

Tras la controvertida decisión de Trump de retirar a Estados Unidos del acuerdo nuclear con Irán, esta cuestión será “el tema dominante” para el presidente estadounidense, según entiende el experto Richard Gowan, del Centro de Investigaciones Políticas de la Universidad de Naciones Unidas.

Pero, ¿estará dipuesto Trump a enfrentarse a la vista de todo el mundo con aliados como Francia o Reino Unido? En lugar de eso, el Consejo de Seguridad podría centrarse en el desarme nuclear a nivel global.

También es posible que Trump y los integrantes de su delegación intenten abordar a puertas cerradas, y al margen de la Asamblea General, un plan de paz para Cercano Oriente. Si así fuera, habría que ver si trasciende algo a la opinión pública.

Costos y poderes

Toda la atención estará puesta en el discurso de Trump, aunque este año ya no sea un debutante en Naciones Unidas. “La pesadilla de todos es que se comporte como en la OTAN y acuse a otros países de no aportar suficiente dinero a la ONU y amenace con reducir su contribución”, apunta Gowan.

Estados Unidos sigue siendo el mayor contribuyente de la ONU. El año pasado, Trump exigió reformas y recortes que en parte se han puesto en marcha o al menos están planificados. Gowan cree que el secretario general de la ONU, António Guterres, y la embajadora estadounidense ante el organismo, Nikki Haley, han conseguido convencer a Trump sobre ese tema. “No creo que Trump conozca los detalles sobre esas reformas, pero puede presentarlo como una victoria”, señala.

Pero Estados Unidos no sólo se ha posicionado contra la mayoría de los miembros de la ONU en la cuestión de los costes, sino también en otros muchos temas, como el pacto nuclear con Irán o acuerdo climático, en los que ha generado un bloqueo.

Estados Unidos está perdiendo su “poder blando”, dijo recientemente Guterres en una entrevista con The Atlantic. Eso podría tener graves consecuencias, advirtió, ya que “no hay forma de resolver la mayoría de los problemas mundiales sin Estados Unidos”.

Según Gowan, en la era Trump el debate de la Asamblea General de la ONU ya no es lo que era. “Antes había esa sensación de que la Asamblea General era un momento en el que se tomaban decisiones”, recuerda. “Ahora todos están a la defensiva. No parece que nadie tenga planes ambiciosos para la Asamblea, se trata solo de salir vivo”, diagnosticó. (DPA)

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