Descubrieron un supuesto menhir en Banda del Río Salí

Descubrieron un supuesto menhir en Banda del Río Salí

Un trabajador de Espacios Verdes de la Municipalidad capitalina lo rescató de entre los escombros. Ahora lo limpiarán y estudiarán.

DISEÑO. Los grabados varían según la perspectiva en que se vean.














DISEÑO. Los grabados varían según la perspectiva en que se vean.
09 Marzo 2018

Todo comenzó el viernes, cuando un hombre se acercó a Ángel Díaz, técnico escultor y trabajador de la Dirección de Espacios Verdes de la Municipalidad de la capital, y le comentó sobre una extraña piedra con detalles tallados que estaba tirada en el barrio La Milagrosa (Banda del Río Salí). Ángel, por mera curiosidad, decidió ir al lugar para comprobar si se trataba de una pieza arqueológica y, en ese momento, se llevó la sorpresa.

“Encontré la piedra en un terreno baldío cubierto de yuyos. Estaba enterrada entre bolsas de basura y una pila de cenizas -narra-. Cuando vi que tenía ambas caras talladas supe que era un menhir y decidí sacarlo del descampado antes de que continúe estropeándose”.

Publicidad

¿Como llegó ahí? es la pregunta que ningún vecino sabe contestar. “La verdad, no me acuerdo cuando apareció esa piedra, sabía que era labrada pero nunca le presté atención -dice Zulema Visuara, vecina de la zona, mientras intenta hacer memoria sobre la antigüedad del supuesto menhir-. Estaba ahí desde hace años, cada tanto había personas que se sentaban a tomar mate pero soy bastante despistada, ¿era muy importante?”

“La piedra estaba ahí”- señala Claudia García mientras apunta hacia un pequeño montículo de basura quemada, al lado de un tronco partido. Claudia, vecina del barrio desde hace 23 años, cuenta que la “rara” piedra estaba en la esquina de su casa desde hacía cinco años: “los chicos se sentaban ahí a conversar, fumar o tomar algo entre amigos pero, además de eso, para nosotros era un pedazo de cemento más”. “Una amiga me contó que la piedra estaba cerca del puente Barros y, cuando comenzaron a pavimentar la zona, la sacaron junto a otros escombros”, agrega.

Publicidad

Las especulaciones sobre cómo llegó esta pieza histórica al lugar varían pero, hasta que los especialistas intervengan, la situación resulta un misterio. No se puede afirmar todavía que se trate de un menhir.

Con una altura de dos metros y un peso de 250 kilos, lo que podría ser un monumento megalítico fue retirado del descampado por seis empleados de Espacios Verdes pero, en el camino, hubo un conflicto de propietarios. Al enterarse de que la piedra podría ser algo importante, los vecinos comenzaron a reclamarla como suya.

Lo mismo, Díaz se lo llevó y dice que está en un lugar seguro. “Estudiaremos las formas y veremos cómo se puede limpiar sin dañarlo. A los ojos de la sociedad puede ser una simple piedra pero, a los ojos de la historia, es parte de nuestro patrimonio. Vamos a asesorarnos sobre el tema y recién tomaremos una decisión”, subrayó.

Tamaño texto
Comentarios
Comentarios