Segundo semestre, un año después

Segundo semestre, un año después

01 Octubre 2017

ROBERTO PICO / AGENCIA DYN

El crecimiento económico, la desaceleración de la inflación y la mejora en el poder adquisitivo de las remuneraciones fueron los factores que se conjugaron para lograr una caída en la tasa de pobreza al 28,6%. Este fue el escenario que el Gobierno nacional, junto a economistas afines, habían prometido para el segundo semestre de 2016 pero que finalmente se demoró un año ante la imposibilidad de imponer un recorte mas severo del déficit fiscal y un mayor freno a los precios. El dato que Cristina Kirchner le arrebató a Mauricio Macri es cuál ha sido la reducción de la pobreza durante su año y medio de mandato ya que cuando dejó el gobierno en diciembre de 2015 hacia más de un año había dejado de calcularse. En aquel momento, mandó a su ministro de Economía, Axel Kicillof, a dar la cara y dejó una frase celebre: “Contarlos es estigmatizarlos”. Y de allí apareció el famoso discurso en la FAO de Cristina Kirchner destacando la situación en la Argentina y el “tenemos menos pobres que Alemania” de Aníbal Fernández. Por tanto, el único dato que quedó como referencia fue la medición de la Universidad Católica Argentina (UCA), que para el cierre de 2015 apuntó un 29% de pobres que se elevó a 33% durante los primeros meses del mandato de Macri.

Publicidad

Realizar comparaciones entre los datos del Indec y la UCA no sería adecuado debido a las diferencias metodológicas entre ambos cálculos. De todas formas, lo que todas las mediciones arrojan es un progreso de los indicadores económicos generales, que se traducen en una mejora de la situación social, aunque aún con 12 millones de argentinos con carencias. Este escenario resulta ideal para el Gobierno nacional de cara a las elecciones de octubre, ya que de acuerdo con las cifras disponibles, desde aquel 13 de agosto hasta el domingo 22 la economía le jugó a favor. Previo a las PASO, los encuestadores sugerían que la situación económica no sería un factor que sumaría voluntades para el Gobierno, pero en los siguientes 50 días el panorama cambió y ahora los candidatos oficialistas pueden agregar estas cifras a su discurso.

Tamaño texto
Comentarios
Comentarios