


> Francisco y Jacinta serán los santos más jóvenes en 2000 años de Iglesia
Francisco y Jacinta Marto, que habían sido beatificados el 13 de mayo de 2000 por el entonces papa san Juan Pablo II, se convertirán en los santos más jóvenes en 2000 años de Iglesia, descontando a algunos pocos niños canonizados como “mártires”. El Papa presidirá la ceremonia el 13 del mes próximo, durante su viaje de dos días (12 y 13) a Portugal. Los dos hermanitos, junto a Lucía Dos Santos, fueron los pastores que vieron a la Virgen en 1917 y recibieron sus mensajes para toda la humanidad.
> Lucía Dos santos
La más grande de los pastores y la única que veía y escuchaba a la Virgen. Lucía Dos Santos había nacido el 22 de marzo de 1907. Entró al convento de Santa Dorotea y luego se cambió al Carmelo de Santa Teresa en Coimbra, como hermana María Lucía del Corazón Inmaculado. En varias ocasiones visitó Fátima y estuvo con Juan Pablo II. Escribió sus memorias donde cuenta todo lo referido a las apariciones. Falleció a los 97 años el 13 de febrero de 2005.

> Francisco Marto
Tenía nueve años cuando se le apareció la Virgen. En junio de 1917 la Señora le anunció que él y Jacinta morirían pronto. Así fue. El 4 de abril de 1919 falleció víctima de una neumonía. Sus restos fueron sepultados en el cementerio parroquial de Fátima, pero en 1952 fueron trasladados a la Basílica de Cova da Iria. Su gran preocupación era “consolar a Nuestro Señor”. Pasaba horas “pensando en Dios”, decía.
> Jacinta Marto
Había nacido en Aljustrel, Fátima, y tenía siete años cuando vio a la Virgen por primera vez. Falleció de neumonía en 1920. Mientras estuvo internada en el Hospital de Villa Nueva de Ourém y en Lisboa, y también en el Orfanato de Nuestra Señora de los Milagros, la Virgen la visitó al menos cinco veces más. Su vida fue caracterizada por el espíritu de sacrificio y preocupación por los pecadores. Su cuerpo se encuentra incorrupto.
“Según cálculos desapasionados de personas cultas y extrañas a influencias místicas, eran de treinta a cuarenta mil personas... La manifestación milagrosa, la señal visible está a punto de producirse, afirman muchos peregrinos... Y uno asiste a un espectáculo único e increíble. Desde lo alto de la carretera, donde se amontonan los carros y se hallan centenares de personas que no han tenido aliento para adentrarse en el barro, se ve a la inmensa multitud volverse hacia el sol, que está limpio de nubes, en pleno mediodía. El astro se asemeja a un disco de plata pálida y se le puede contemplar cara a cara sin ninguna molestia. Parece un eclipse. Pero he ahí que se eleva un colosal clamor y oímos que los espectadores exclaman: “¡Milagro! ¡Milagro! ¡Maravilla!”
Así describía “la danza del sol”, en Fátima, Portugal, el periodista ateo Avelino de Almeida, en el periódico portugués O Século. El 13 de mayo de 1917 tres niños pastores: Lucía Dos Santos, de 10 años, y sus primos Francisco y Jacinta Marto, de nueve y siete años, declararon que habían visto a la Virgen. Ella, que se identificó como Nuestra Señora del Rosario, se les apareció seis veces, desde el 13 de mayo hasta el 13 de octubre de 1917, siempre los 13, a excepción del 19 de agosto (cuando los niños fueron secuestrados por el alcalde de Vila Nova de Ourém para obligarlos a retractarse y a revelar los secretos).
Al principio muchos no creían en sus palabras pero luego las fueron aceptando, hasta la misma Iglesia. Lucía entró al convento y escribió sus memorias. Sus primos fallecieron al poco tiempo y ella los sobrevivió hasta los 97 años.
El padre Amadeo Tonello, párroco de Nuestra Señora de Fátima, dice que los mensajes pueden resumirse en tres puntos: oración, conversión y penitencia. “Oración porque es necesario centrar la vida en Dios y pedir por la resolución de los males que aquejan al mundo, pero sobre todo debemos rezar diariamente el rosario, que nos une a María y nos permite contemplar los misterios de la vida de Jesús. En segundo lugar, conversión: hay que arrepentirse y volver a Dios; los grandes males de este mundo tienen su origen en el olvido y desprecio de Dios y de sus mandamientos, olvido que tiene como consecuencias la violencia, la injusticia, las guerras y otros males. Penitencia: es el modo en que los cristianos podemos unirnos a Cristo sufriente y crucificado, y ofrecer, igual que Él, nuestros dolores en reparación por los pecados de los hombres y por la salvación del mundo”, reflexiona.
Algunos de los mensajes transmitidos por los niños presagiaban guerras y calamidades en el mundo. El 13 de julio, en la Cueva de Iria les fue confiado a los niños un gran secreto que Lucía entregó a la Santa Sede. Fue revelado en 2000, bajo el pontificado de Juan Pablo II.
Cada encuentro de los niños con la Virgen era seguido por miles de personas que se concentraban en el lugar. La Virgen pedía insistentemente el rezo del rosario para la conversión de los pecadores y la devoción a su Inmaculado Corazón, así como su consagración al mundo, lo que finalmente cumplió el papa Pío XII.
> LAS PROFECÍAS
- La conversión de Rusia al cristianismo
“La Primera Guerra mundial terminará pronto. Sin embargo, si la humanidad no deja de ofender a Dios, otra guerra peor surgirá en el Reino del Papa Pío XI. Cuando ustedes vean una noche iluminada por una luz desconocida, sepan que este es el gran signo que Dios les da, porque Él va a castigar al mundo por sus crímenes a través de las guerras, el hambre, la persecución de la Iglesia y del Santo Padre. Para impedir esto, yo vendré a pedir la consagración de Rusia a mi Inmaculado Corazón y la comunión de reparación de los Primeros Sábados. Si mi petición es acatada, Rusia se convertirá y habrá paz. Si no, Rusia transmitirá sus errores a través del mundo, promoviendo guerras y la persecución de la Iglesia; los buenos serán martirizados, el Santo Padre tendrá que sufrir mucho, varias naciones serán aniquiladas; en el final mi Inmaculado Corazón triunfará. El santo Padre consagrará Rusia a mí, la cual se convertirá, y algún tiempo de paz se le dará al mundo.”
En el mismo año de las apariciones tuvo lugar la Revolución de Octubre o Revolución bolchevique, segunda fase de la Revolución rusa de 1917. Esto condujo al nacimiento de la Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas (URSS) en 1922, con un sistema político de partido único dominado por el Partido Comunista. Pero en 1990 se desintegró la URSS y se cumplió la profecía.
- Intento de Asesinato de Juan Pablo II
El tercer mensaje del “secreto de Fátima” incluyó una profecía sobre el intento de asesinato de Juan Pablo II, que ocurrió el 13 de mayo de 1981, en el 64° aniversario de la primera aparición de Fátima.
- El último secreto revelado en 2000
La tercera parte del secreto de Fátima fue revelado el 13 de mayo de 2000. Es una visión que aún no está descifrada: “(...) El Santo Padre (...) atravesó una gran ciudad medio en ruinas (...) apesadumbrado de dolor y pena, rezando por las almas de los cadáveres que encontraba por el camino; llegado a la cima del monte, postrado de rodillas a los pies de la gran Cruz fue muerto por un grupo de soldados que le dispararon varios tiros de arma de fuego y flechas; y del mismo modo murieron unos tras otros los obispos (...) hombres y mujeres de diversas clases y posiciones. Bajo los dos brazos de la Cruz había dos ángeles, cada uno de ellos con una jarra de cristal en la mano, con las que recogían la sangre de los mártires y regaban con ella las almas que se acercaban a Dios”.







